La crisis energética y la invasión rusa de Ucrania han empujado a numerosos países europeos a diversificar sus suministros de energía. Se trata de una cuestión vital para los estados ubicados en el norte y el centro de Europa, tradicionalmente muy dependientes de los hidrocarburos rusos. En este contexto, el hidrógeno verde se ha revelado como una gran alternativa, hecho que ha facilitado la aprobación de dos corredores verdes desde el Mediterráneo al norte de Europa: el H2Med, que parte desde la Península Ibérica, y el SoutH2, que comienza en Argelia. Sin embargo, es en el norte donde han comenzado las obras de la primera conexión europea de hidrógeno verde: Se denomina HyTransPort, se encuentra en Países Bajos y el plan es que se extienda hacia Bélgica y Alemania, formando un nuevo núcleo energético en el norte del continente.

Redactor de economía, mercados, energía y política internacional. Graduado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.