
La Cuenca Pérmica, situada entre Texas y Nuevo México, es el mayor campo de petróleo de EEUU. Su parecido con Arabia Saudí es cada vez mayor, no sólo por la caída de los costes de producción, también por la capacidad ociosa de bombeo de crudo, que da muestras del potencial de esta formación que ha sido fundamental para que EEUU vuelva a superar los 10 millones de barriles al día de producción de crudo.
Según Nansen Saleri, antigua director de gestión de yacimientos en Aramco (la petrolera estatal de Arabia Saudí), todos los productores que trabajan en la Cuenca Pérmica podrían incrementar la producción de crudo en 500.000 barriles al día casi de la noche a la mañana.
Capacidad ociosa, como Arabia Saudí
La Cuenca Pérmica es una joya petrolera dentro de EEUU. Es habitual que países como Arabia Saudí produzcan petróleo por debajo de su potencial para intentar mantener los precios del crudo en el punto más óptimo posible, pero pocos habrían apostado a que una formación dentro de EEUU iba a tener la capacidad de jugar con su producción potencial.
Saleri, ahora director de la consultora Quantum Reservoir Impact, destaca en declaraciones a Bloomberg que "durante décadas, hubo un país y una compañía que mantenían parte de su capacidad ociosa, ese país era Arabia Saudí y la compañía era Aramco". Arabia Saudí, que también está produciendo unos 10 millones de barriles al día, podría bombear hasta 11,5 millones de barriles si se lo propusiese.
"Los operadores que no son eficientes han ido abandonando el juego y sólo quedan los que trabajar con mayor eficiencia", asegura Saleri. Si el petróleo se mantiene por encima de los 60 dólares durante los próximos meses, las empresas volverán a perforar nuevos agujeros, lo que supondría a media plazo más producción.

Según datos del último informe de la Agencia de la Energía de EEUU, la Cuenca Pérmica va a producir en el mes de febrero 2,870 millones de barriles al día, tras incrementar en 76.000 barriles diarios el bombeo. Ahora mismo, Pérmica produce cerca del doble de petróleo que toda Venezuela entera, cuyo rendimiento ha sido en enero de 1,6 millones de barriles al día.
La pregunta clave es ¿cómo un campo de petróleo en EEUU puede incrementar su producción en 500.000 barriles con los actuales precios del petróleo?. La Cuenca Pérmica, más que un campo de petróleo es una región con varias formaciones de las que se puede extraer petróleo ligero a través de formaciones rocosas de baja permeabilidad. Las seis formaciones principales son Spraberry, Wolfcamp, Bone Spring, Glorieta and Yeso y Delaware, en las que se usa la técnica conocida como fracking para extraer el petróleo.
La formación perfecta para el petróleo
Estas ricas formaciones están apiladas en un espacio relativamente pequeño que convierten a esa zona en un 'caramelito' para las petroleras y perforadoras, que logran rentabilizar cada barril. El bombeo de petróleo en la Cuenca Pérmica se ha mantenido en crecimiento continuo durante los últimos años, a pesar de que los precios del petróleo cayeron por debajo de los 30 dólares el barril. El resto de regiones tuvieron que reducir su producción durante la parte más dura del temporal ante la complejidad de rentabilizar la extracción de crudo a unos precios tan bajos.
Esta región ha producido petróleo de forma estable durante décadas, pero ha sido la revolución del fracking (fracturación hidráulica) la que ha revitalizado la zona. Esto, junto con la capacidad local de refinación de crudo y la proximidad casual a las refinerías de la Costa del Golfo han hecho de la Cuenca Pérmica un lugar ideal para la extracción de oro negro y gas.
La técnica del fracking permite sacar petróleo de formaciones poco permeables. A grosso modo, esta técnica consiste en la perforación del suelo hasta alcanzar las capas rocosas que contienen el petróleo. Después se introduce en el pozo creado un conducto que producirá la fracturación hidráulica a través de la expulsión a presión de agua, arena y químicos. El agua a presión fractura las rocas, mientras que los granos de arena mantienen abiertas las fisuras de las rocas para que el crudo vaya fluyendo hacia el pozo.