Coordino el fin de semana en elEconomista.es. Desde que llegué a este medio en 2016, escribo principalmente de EEUU y su economía. Además, imparto clases de Relaciones Internacionales en la universidad.

Los bancos centrales han sido los grandes protagonistas económicos de la semana. La Reserva Federal de EEUU anunciaba el miércoles una subida de 75 puntos básicos en los tipos de interés, lo que esperaba la mayoría del mercado, aunque su presidente, Jerome Powell, metía el miedo en el cuerpo de los inversores endureciendo su hoja de ruta. Unas horas después, Suiza imitaba al banco central estadounidense y dejaba atrás las tasas negativas, mientras Inglaterra limitaba a 50 puntos básicos su incremento. En los tres casos, la cifra de inflación -el gran enemigo a combatir- no llega a doble dígito. Pero Turquía insiste a navegar a contracorriente.

Meta Platforms, la matriz que aglutina a Facebook, Instagram, WhatsApp y otras aplicaciones tecnológicas, no atraviesa por su mejor momento. Esta semana su acción ha perdido los 150 dólares, algo que no hacía desde enero de 2019 - con la excepción de un día durante el gran batacazo bursátil de marzo de 2019 por la pandemia de coronavirus. Pero aún así el auge de las redes sociales ha hecho que quienes invirtieron a largo plazo en la firma se hayan embolsado jugosos beneficios.

Los precios se disparan en los últimos meses y los ingresos cunden cada vez menos. Además, las hipotecas a tipo variable no dejan de subir y los escasos ahorros no dan de sí. Los más soñadores se aferran a que les toque la Lotería o el Euromillones, aún sabiendo que la probabilidad es realmente baja. Pero, ¿cómo de baja?

Una de las aplicaciones de inversión más nombradas en los últimos años ha dado un paso más allá. Robinhood ha presentado un índice bursátil que aglutinará las cien compañías que más poseen sus usuarios, dando así una idea de las preferencias de sus inversores.

El mundo de la economía cripto lleva más de una década expandiéndose. La defensa del anonimato y de una economía alejada de los estados y los bancos centrales ha calado en una parte de la sociedad que se siente subyugada por estas instituciones y se ampara en el blockchain como alternativa. Pero, como en cualquier otra faceta, algunos aprovechan la falta de regulación del 'criptoverso' para enriquecerse ilícitamente.

En junio de 2009 varios colectivos cinematográficos españoles lanzaron la 'Fiesta del cine', tres jornadas en las que las salas de exhibición ofertaban precios superreducidos para fomentar la asistencia. Trece años después, una iniciativa llega a Estados Unidos para intentar reanimar a un sector que no ha logrado recuperarse de la pandemia.

El gran evento anual de los banqueros centrales estaba marcado en rojo en el calendario de los inversores. Las esperanzas de que, al menos en Estados Unidos, se vislumbrase una moderación de las políticas monetarias restrictivas se quedó en eso, en una vana esperanza. Si Powell dejó claro el viernes que la 'mano dura' de las subidas de tipos continuará para frenar la inflación, el sábado fue el turno de los participantes europeos, que tampoco cambiaron el diagnóstico.

Como Ícaro, MoviePass quebró en 2019 por querer volar demasiado cerca del sol. La empresa fundada en 2011 ofrecía entradas de cine en EEUU a bajo precio, pero la ambición de crecer, sumada a una constante huida hacia adelante y una mala gestión financiera acabó con el primer gran proyecto de suscripción a las salas de cine. El pasado, sin embargo, parece no importarles a los más de 460.000 usuarios que se han apuntado en las primeras 24 horas a la lista de espera para el renacimiento de MoviePass.

La pandemia del coronavirus y los distintos confinamientos a los que los gobiernos sometieron a la población incrementaron el precio de la vivienda en todas partes. La aspiración a mejorar el hábitat propio de cara a otro posible encierro doméstico tiró al alza del precio. En Estados Unidos, el número de ventas de vivienda construida se disparó en los meses posteriores a lo más duro de la pandemia, con hasta 6,7 millones de domicilios construidos vendidos en un solo mes. Pero el frenazo de esta variable y de otros indicadores empieza a desvelar un cambio importante en el mercado inmobiliario estadounidense que algunos ya tildan de "recesión".

tecnología

En plena ola inflacionista en buena parte del planeta, la industria de los videojuegos era una de las pocas que aún no había dado un impulso a los precios de sus productos. Sony ha sido la primera en hacerlo, anunciando el encarecimiento de la PlayStation 5 (PS5) en los principales mercados internacionales.