David Muñoz
¿Y si me quedo como estoy? ¿De verdad tengo que migrar al nuevo sistema? Estas se han convertido en "las preguntas del millón", que seguramente los profesionales de recursos humanos se hayan planteado recurrentemente en los últimos meses. ¿La respuesta? Rotundamente sí. Y no solo eso, se debe tener en cuenta que si no se ha comenzado ya a preparar, mañana probablemente será tarde. Ya no se puede aplazar, porque en cualquier momento lo que parecía un futuro lejano se puede volver una realidad inmediata en la que la "técnica del avestruz" ha demostrado no ser efectiva.