Redactora de mercados, con el foco puesto en las finanzas personales y en los fondos de inversión.

La cartera del Eco30, que reúne 30 compañías de calidad mundial con un componente de diversificación sectorial y está auditada como índice por Stoxx desde 2013, ha decidido reducir su exposición a la parte más cíclica, que hasta ahora ha tenido mejor comportamiento, con la venta de las petroleras Suncor Energy y Total Energies, y ha optado por introducir crecimiento, con la incorporación de la holandesa ASM Internacional y defensa frente a la inflación con la estadounidense Equitable Holding, para proporcionar mayor estabilidad a la cartera.

Rodrigo Buenaventura, presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), ha asegurado durante su comparecencia ante la Comisión de asuntos económicos y transformación digital en el Congreso de los Diputados, que todos debemos contribuir a la lucha contra el fraude financiero. "Estoy pensando, por ejemplo, en los deportistas y en los organizadores de competiciones deportivas. Incrementaremos la vigilancia en este ámbito, e incluso analizaremos si fuese necesaria regulación nueva, para evitar que la promoción de entidades no autorizadas o de productos de alto riesgo en eventos deportivos, diseñada para financiar a los clubes o las organizaciones, ponga en peligro los ahorros de los seguidores y los aficionados", ha explicado.

Mantener los nervios a raya nunca es fácil cuando el mercado corrige con fuerza y lo hace, además, en un contexto de poca visibilidad en el que los bancos centrales están dispuestos a controlar a una inflación desbocada, aunque ello suponga acabar con el crecimiento de la economía. Pero cuando además no es solo la bolsa quien encara un mercado bajista, sino que también lo hace la renta fija (con caídas en el precio superiores al 20% en referencias como en el bono español a 10 años desde principios de enero), la tarea se vuelve casi imposible si se tiene en cuenta que el inversor conservador, por definición, busca preservar su capital, y, sin embargo, este año afronta pérdidas superiores al 7%, que son aún mayores si se incluye el efecto de la inflación.

Las caídas dejan más consecuencias en los fondos activos de bolsa española: azValor Iberia es el único que conserva retornos de doble dígito y el 76% de estos productos ya está en negativo en el año.

La rápida y violenta corrección que se ha producido en el precio de los bonos provoca ya que éste sea el peor comienzo de año de la historia, con pérdidas de doble dígito en la mayoría de índices de renta fija. Los expertos creen que la volatilidad continuará pero también que no es momento de vender porque eso implicaría materializar abultadas pérdidas en un momento en el que empiezan a ver algunas oportunidades dentro de la renta fija.

El éxito que tuvieron los fondos mixtos en el pasado, a raíz de que la banca empezara a ofrecerlos como alternativa a los depósitos bancarios a finales de 2015, empieza a diluirse. Según los últimos datos disponibles en Inverco sobre los fondos nacionales, los que invierten la mayor parte de su cartera en renta variable han perdido al 45% de los partícipes este año, pasando de los 53.400 a los 29.600 -la cifra más baja desde que hay datos-; mientras que en los de renta fija se han visto reducidos también en un 20%, hasta los 460.000 -mínimos de 2016-.

El aumento sostenido de la inflación ha terminado con diez años de políticas ultraexpansivas (bajos tipos de interés e inyección masiva de liquidez) de los bancos centrales. El mercado empieza a descontar una acción más dura por su parte, que ha propulsado aún más las ventas que desde principios de año se imponen en la renta fija. La velocidad con la que se produzcan las subidas es motivo de preocupación en el mercado. Sin embargo, Daniel Lacalle, economista jefe de Tressis, explica que "la idea de que si se hacen moderadamente no tendrá impacto en la economía no tiene ningún sentido. Cuánto más rápido mejor".

El dinero que sale de las bolsas no busca refugio en los bonos. La renta fija volvió a ser objeto de ventas un día más, incluida la soberana. El Banco Central Europeo (BCE) mostró el jueves un firme "compromiso" por evitar una fragmentación en el mercado de bonos, asegurando que utilizará todos los medios a su alcance, sin especificar cuáles, para impedir que la rentabilidad de los de la periferia se dispare respecto a los del núcleo de Europa, como ya pasó en 2011 o 2012, cuando la rentabilidad del bono español se disparó al 7% frente al 2% del alemán. Pero, por ahora, sus palabras no han sido suficiente para evitarlo. Desde ese día, el inversor exige 20 puntos más de rentabilidad al bono español a 10 años respecto al alemán.

Toda la deuda pública ha visto cómo su precio se desplomaba este año, en línea con lo que ha ocurrido con el resto de una renta fija que vive el peor inicio de año de su historia ante el cambio de rumbo de los bancos centrales hacia la normalización de sus políticas monetarias. Pero si hay una que ha sufrido más que el resto, dentro de la deuda pública, es la de la periferia europea.