Redactor en la sección de empresas, con el foco puesto en los fondos de 'private equity', el M&A y las reestructuraciones. Graduado en periodismo y especializado en economía. Trabajé durante cuatro años en Economía Digital y más tarde me incorporé a La Información (Grupo Henneo). Entré a formar parte de elEconomista en diciembre de 2022. Contacto: cristian.reche@eleconomista.es.

Kartesia, gestora paneuropea especializada en inversiones de deuda y capital, pone a la venta una nueva participada en España. El grupo inversor ha mandatado a Socios Financieros y a Bluebull para buscar comprador de la mayoría que tiene en la tecnológica Veta+, de acuerdo a distintas fuentes financieras consultadas por elEconomista.es. La compañía especializada en el sector asegurador ha recibido en los últimos meses muestras de interés de potenciales inversores y entrará ahora en un proceso en el que se espera que se presenten fondos de capital riesgo y competidores industriales.

Investindustrial saca músculo en España. La gestora de capital riesgo de origen italiano propiedad de la familia Bonomi ha llegado a un acuerdo para adquirir Delta Tecnic, fabricante mundial químico especializado en la producción de masterbatches customizados de color y de aditivos para una variedad de industrias, incluyendo el sector de cables. Esta empresa, que estaba participada por el fondo Aurica hasta que a finales de diciembre fue recomprada por los socios, cambia ahora nuevamente de manos y pasa a estar participada por un fondo por segunda vez en dos años.

Centros Único, la cadena de depilación y medicina estética controlada en su mayoría por los empresarios Azucena Rubio y Jorge Cabrero y participada por la gestora Oquendo Capital, entra en apuros financieros. La compañía, una de las firmas de depilación más importantes de España que llegó a protagonizar una gran etapa de crecimiento e incluso despertó el interés del fondo estadounidense HIG, no ha podido cumplir con el plan de negocio acordado con la banca el pasado mes de febrero y ha solicitado concurso de acreedores, según distintas fuentes consultadas por elEconomista.es.

España supera la barrera de los 4.000 millones de inversión de los grandes fondos y patrimonios en las inmobiliarias cotizadas del país. El umbral se ha superado con la última oferta pública de adquisición que Helios, consorcio formado por el fondo Hines y el grupo Lar, han llevado a cabo sobre la socimi española. En suma, son ya ocho grandes operaciones las que se han llevado a cabo en torno a las compañías referentes y tenedoras de oficinas, suelo residencial y hoteles del país. En algunas de ellas han estado como implicados nombres tan relevantes como el del gigante de la inversión Blackstone, la socimi Merlin o el magnate mexicano Carlos Slim.

Marypaz, la cadena de zapaterías que fue propiedad del fondo Black Toro y posteriormente volvió a manos de sus fundadores, trata de superar el concurso de acreedores. El administrador concursal de la compañía, EY, ha elaborado ya el informe provisional sobre la situación financiera de la empresa, en la que ha detectado un déficit patrimonial provocado, en parte, por las deudas de más de 20 millones de euros que arrastra. La radiografía realizada arroja también un descenso constante de las ventas, que cristalizan en nuevas pérdidas en lo que va de ejercicio, y pone énfasis en la búsqueda sin éxito de un inversor emprendida en los últimos meses para revertir la situación.

Salud

El fondo canadiense Brookfield junto a la familia Grifols negocia una opa sobre la farmacéutica catalana. Tras 18 años cotizando en bolsa y más de un siglo como empresa familiar, que ha pasado de generación en generación, la saga fundadora de la compañía y el gigante mundial de la inversión estudian tomar el control de manera conjunta para posteriormente excluir a la compañía del parqué. Para esta operación P2P (public to private), como así se conoce en el sector, la futura oferta pública de adquisición deberá recabar el apoyo de, al menos, el 75% del accionariado. O lo que es lo mismo, el 45% habida cuenta de que el 30% ya está en mano de la familia fundadora.

Es una de las firmas líderes en el mundo de las inversiones en activos alternativos. Con más de 925.000 millones de dólares en activos bajo gestión, el gigante Brookfield ha saltado a los focos tras conocerse que explora una oferta pública de adquisición por Grifols. La operación, de la que todavía no se tienen detalles, le llevarían a lanzar una propuesta de, al menos, 6.000 millones de euros -mucho menos que lo que capitalizaba antes de recibir la ofensiva de Gotham City Research-, lo que convertiría al fabricante de hemoderivados en su mayor participada en España.

Nuevo proceso de desinversión de una participada de un fondo de capital privado en España. ProA Capital, private equity nacional con 1.075 millones de capital comprometido, ha vuelto a sacar al mercado Delafruit (antigua Go Fruselva), según las fuentes consultadas por elEconomista.es, con vistas a una venta tras intentarlo por primera vez sin éxito en 2021. La previsión de la firma que lideran Fernando Ortiz, Carlos Gordillo, Santiago Gómez y Vito Torciano, según las mismas fuentes, es lograr una valoración similar, de más de 150 millones de euros de una participada que tiene en cartera desde hace ocho años.

REPORTAJE

Están habituados a aparecer en situaciones especiales y hay quien les califica de especuladores e incluso de buitres. Los fondos oportunistas han tomado posiciones en España en los últimos años al calor de distintas crisis, desde la económica de 2011 hasta la sanitaria de 2020. Las grandes empresas familiares del país no han sido una excepción y no han podido escapar a la oferta de estos grandes inversores, cuyo modus operandi suele ser compartido, con la firma de créditos onerosos con cláusulas leoninas por asumir mayores riesgos y la compra en secundario de crédito bancario como denominador común. En algunas situaciones, la combinación de estas prácticas llega a cristalizar en la toma de control de las compañías y un cambio radical en la gestión, una vez se asume que la situación financiera es insostenible.

El primer tramo de la línea de alta velocidad ferroviaria de Portugal será ejecutado por un consorcio liderado por la constructora portuguesa Mota-Engil. A pesar del interés que inicialmente había despertado el proyecto en la mayoría de las principales enseñas españolas, éstas han decidido desbancarse del concurso ante la, a su juicio, inviabilidad financiera. El pliego del contrato recoge una inversión para obras de aproximadamente 1.000 millones de euros y las estimaciones del sector privado, con los costes actuales de mercado, apuntan a unas necesidades cercanas a los 1.800 millones.