Escribiendo cosas económicas desde 2018, pero ya he pillado unas cuantas crisis. Di mis primeros pasos en Europa Press y luego en El Confidencial. Ahora sigo el rumbo del dinero y los mercados en El Economista.

En plena era de altos tipos de interés, EEUU se ha encomendado a una vorágine de deuda para salvar su déficit. Los recientes datos que ha arrojado un mercado de emisiones del tesoro desatado han encendido las alarmas de expertos, analistas e instituciones. El último en cargar contra esta situación ha sido el 'perro guardián' del Congreso. La Oficina de Presupuesto no partidista de la cámara (CBO, por sus siglas en inglés) ha señalado que teme en los próximos años un 'colapso' como el que ocurrido con la libra en 2022 tras anunciar su plan económico, debido a "la trayectoria sin precedentes de carga fiscal".

Wall Street parece atrapado en una espiral alcista que no tiene fin. Este 2024 el S&P 500 sube un 10% y ya supera el 30% en los últimos 12 meses. Primero la euforia por la IA y las siete magníficas, luego la ilusión por el recorte de tipos, la fortaleza económica... Una sucesión de acontecimientos han ido agregándose e impidiendo que esta subida se detenga. Sin embargo, ya hay quien piensa que los principales índices de EEUU necesitan una corrección, que los avances han ido demasiado lejos y que ahora toca un potente retroceso para 'volver a la realidad'. El desencadenante de este giro sería el final de uno de los grandes baluartes detrás del 'boom' de la bolsa, la fortaleza del dólar.

La economía de México ha sido una de las grandes revelaciones de estos últimos años. A pesar de que el avance del país ha pasado bajo el radar repetidamente, la realidad es que se trata del quinto país del G20 con mayor crecimiento del PIB, solo por detrás de la India, China, Indonesia y Turquía y el líder indiscutible de latinoamérica. Con un avance del 3,2% ha conseguido minimizar la desaceleración desde el 3,9% del 2022. Una sólida e inesperada demanda interna se ha mezclado con un hito histórico, convertirse en el socio comercial número 1 de EEUU, lo que le ha permitido incrementar sus exportaciones mientras el mundo cada vez compra menos, dando vida a su economía. Sin embargo, los analistas y expertos temen que Donald Trump pueda acabar con esta ventaja diferencial.

IBM era el auténtico imperio tecnológico de Wall Street. Esta firma dominó la industria de la informática desde los sesenta y su poder llegó a preocupar a EEUU a tal extremo que protagonizó uno de los juicios por posición dominante más largos y conocidos de toda la historia. Tras 20 años de gobierno ininterrumpido y el 62% de toda la cuota mundial bajo su dominio, los ochenta fueron la sentencia de su reinado. IBM tomó una decisión que cambiaría la historia del sector, no entendió que el futuro pasaba por el software y aceptó que una pequeña empresa de 40 empleados, Microsoft, fuera la que diseñara su sistema operativo para PC, aceptando que se quedara con los derechos de licencia.

Algo ha cambiado con el petróleo. Desde la recta final del año pasado, todo el mundo daba por hecho que el mercado quedaría inundado, asegurando unos precios bajos. Citi hablaba de un barril a 74 dólares de media para todo el año y JP Morgan proclamaba que "creemos que el Brent se mantendrá estable en 2024 (por debajo de los 82 dólares)". Sin embargo, en lo que va de año el barril de referencia europeo (Brent) ha llegado a superar la barrera de los 87 dólares tras avanzar un 13% desde mínimos de 2024 y un 17% desde que tocó suelo en diciembre de 2023.

El calendario de los bancos centrales no se detiene. Tras la reunión de la Fed, este jueves ha salido a la palestra el Banco Nacional de Suiza (BNS), que ha decidido de manera inesperada recortar los tipos 25 puntos básicos. La institución monetaria, de este modo, ha dejado el precio del dinero en el 1,5% desde el 1,75% anterior. El consenso del mercado esperaba que no hubiera movimientos por ahora sin embargo, el BNS ha mostrado un optimismo pleno en la derrota de la inflación que le ha llevado a moverse ya mismo.

El metal más valioso del mundo no es el oro, ni la plata, ni el platino, era claramente el rodio. Esta escasa materia prima tiene un uso muy concreto, es necesaria para los catalizadores de los vehículos, que permiten que los coches de combustión emitan menos contaminación. Con las normativas de la UE, China y EEUU para limitar las emisiones, este material vivió un ascenso frenético como pocos se recuerdan en 2021, llegando a multiplicar por seis su valor. Ante los esfuerzos climáticos de los países, todo parecía indicar que los precios del rodio se mantendrían disparados y volátiles, pero la realidad es que el escaso material ha vuelto a la casilla de salida, perdiendo un 84% desde su punto álgido en 2021.

Entre los numerosos problemas que afectan a Reino Unido, una crisis soterrada, que lleva 14 años fraguándose pero cuyos orígenes se remontan hasta Margaret Thatcher, ha desatado la sorpresa. En lo que va de legislatura ya se han puesto en marcha los trámites para activar 8 procesos de quiebra entre los ayuntamientos británicos, en lo que es tan solo el aperitivo de una auténtica oleada de impagos. Desde la Unidad de Información de Gobiernos Locales (LGiU, por su siglas en Inglés), han lanzado un informe advirtiendo que el 51% de todas las administraciones entrarán en quiebra la próxima legislatura. Un auténtico incendio que obligará no solo a un rescate a gran escala, sino que está forzando desde ya a recortar de forma masiva los gastos para adecuarse a la legislación.

La economía de EEUU está aguantando sorprendentemente bien a pesar de un entorno de altos tipos de interés. Aunque 'el precio del dinero' se encuentra en el rango de 5,25% al 5,5%, el PIB del país ha sorprendido al mundo creciendo un 2,5% en 2023, seis veces más de lo que esperaba el mercado a comienzos del año (0,4%, según el consenso de Bloomberg). Destaca en particular el tercer y cuarto trimestre cuando, justo cuando los tipos empezaban a llegar a su punto álgido, la economía de la potencia norteamericana tuvo un avance interanual del 4,9% y del 3,2% respectivamente. Entre otras cosas, los expertos señalan a una causa para esta 'resistencia' del PIB de EEUU, unos precios del gas cayendo a marchas forzadas.

Un misterio recorre el mercado… ¿qué está pasando con el oro? El valor defensivo por excelencia está viviendo un potente repunte cuando ya se encontraba en zona de máximos históricos. Una situación que ha pillado a contrapié a los analistas, que en su mayoría se están definiendo a lo que está ocurriendo como un 'misterioso repunte' que no alcanzan a comprender. A pesar de que hay motivos que pueden apoyar a la materia prima, los argumentos en contra hacen que estos resulten para muchos 'insuficientes', una situación "desconcertante" que ha llevado a movimientos extraños, como un oro al alza mientras los ETF de la materia prima registran salidas.