
El presidente de CaixaBank, Jordi Gual, ha abogado este viernes en la junta de accionistas de la entidad por la necesidad de realizar un esfuerzo fiscal coordinado y sustancial a nivel europeo para poder afrontar la crisis del coronavirus. A su juicio, Europa debería implementar un mecanismo de compartición de gasto para poder dar una "respuesta contundente" a los efectos de la pandemia. "El acuerdo de Alemania y Francia es muy positivo y sería deseable que saliera adelante", señaló. La propuesta de estos dos países pasa por crear un fondo de recuperación de la economía europea de 500.000 millones de euros destinado a los países y los sectores más golpeados por el Covid-19, vía transferencias presupuestarias.
No obstante, el presidente de CaixaBank valoró la efectividad de las políticas económicas de España para dotar de más recursos a la Sanidad y también las dirigidas a mitigar el golpe de la pandemia a las familias y empresas, como la línea ICO de 100.000 millones de euros para financiar a compañías, pymes y autónomos. Gual aseveró que, a través de CaixaBank ya se han dado más de 12.000 millones de euros a través de esta línea.
Según el presidente de la entidad, los datos económicos ya evidencia un "choque" de enorme magnitud. "Las cifras de crecimiento fueron malas en el primer trimestre, pero en el segundo mostrarán caídas superiores", apuntó. De momento, advirtió que es difícil cuantificar la caída del PIB con dos escenarios probables, el primero con una descenso de la actividad superior a los peores años de la última recesión, pero con una recuperación significativa en 2021, y el segundo, con una caída de la economía de dos dígitos y una recuperación más lenta, tal y como pronostica también el Banco de España.
Gual aseguró, sin embargo, que el banco que encabeza se enfrenta a la crisis con una posición de fortaleza, con liderazgo en la gran mayoría del negocio minorista en España que ha demostrado resiliencia en un entorno de tipos mínimos y bien posicionado para crecer en Portugal a través de la filial BPI. En este aspecto, recordó que el banco ha mejorado su rentabilidad con niveles superiores al 10% en 2019, si se excluyen los efectos de la reestructuración que se cobró la salida voluntaria de 2.000 empleados.
En materia de liquidez, la entidad cuenta con 100.000 millones de euros, duplicando el mínimo regulatorio. Gual ha recordado que CiaxaBank provisionó 400 millones de euros en el primer trimestre para anticiparse a los efectos que va a tener la pandemia sobre el coste de riesgo. "Refleja la estrategia conservadora respecto a la cobertura de riesgos que siempre ha caracterizado a nuestra entidad", dijo.
Dividendo y bonus
CaixaBank es de las pocas entidades españolas que ha mantenido la distribución de dividendo a cargo de los ejercicios 2019 y 2020, aunque con variaciones, a pesar de la recomendación del Banco Central Europeo (BCE) del pasado 27 de marzo de cancelar el reparto a los accionistas hasta octubre de este año para acumular reservas con las que ayudar a financiar a familias y empresas.
El banco decidió en marzo aplicar una rebaja del reparto a cargo del beneficio de 2019 de 15 céntimos a 7 céntimos por acción, lo que equivale al 24% del beneficio neto logrado el año pasado. Además, mantiene una propuesta de reparto a cargo de 2020 no superior al 30% del beneficio neto. "Retener el resultado permite reforzar la solvencia para mantener la necesidad de financiación de los clientes y absorber con comodidad el aumento del riesgo que se pueda producir", señaló el presidente del grupo financiero. Aunque los accionistas han dado hoy el visto bueno a la propuesta, el reparto ya se realizó el 15 de abril.
Por otro lado, los socios de la entidad también han aprobado la propuesta de renuncia del bonus de la alta dirección de CaixaBank, en consonancia de las recomendaciones del BCE.
"Deberes hechos"
El consejero delegado del banco, Gonzalo Gortázar, por su parte, señaló que, en el corto plazo, la pandemia va a tener un impacto negativo en la entidad. De hecho el grupo ya cerró el primer trimestre con unas ganancias un 83% inferiores, tras incrementar las provisiones para blindarse contra la pandemia. El ejecutivo, no obstante, aseveró que la evolución del negocio en 2019 fue "muy positiva", lo que permitió al banco cerrar el año "con los deberes hechos para hacer frente a una situación que se ha producido de forma más ácida y repentina de la que pensábamos".
Gortázar remarcó que el ratio de mora se rebajó al 3,6% y el ratio de solvencia CET 1 alcanzó el 12%, por encima de los competidores. "Esto nos permite afrontar la crisis con mucha confianza y capacidad de darlo todo por nuestros clientes y ayudar en la recuperación", dijo.
Medidas de apoyo
Tanto Gual como Gortázar mostraron su apoyo y solidaridad a las personas que han sufrido de cerca el coronavirus y agradecieron a los empleados, especialmente a los que están en las oficinas, su trabajo en primera línea a pesar de la situación. El banco ha mantenido abiertas el 90% de sus sucursales durante los peores momentos del confinamiento.
Entre las medidas aplicadas por el grupo financiero para aliviar los efectos de la crisis sanitaria, CaixaBank ha adelantado el abono de las pensiones para evitar aglomeraciones en las sucursales y también el cobro de las prestación por ERTE o desempleo. Más de 3,2 millones de clientes se han beneficiado de estas medidas. Además, la entidad ya ha concedido 344.000 solicitudes de moratoria de préstamos, ha aprobado 143.000 operaciones de créditos ICO y condonado el alquiler a 4.300 familias que habitan una vivienda del banco.
CaixaBank ha celebrado la junta de accionistas por vía telemática ante las restricciones de movilidad y distancia social a las que obliga la pandemia. Inicialmente, el banco tenía previsto celebrar la asamblea entre los días 2 y 3 de abril, aunque la acabó cancelando ante la inesperada crisis sanitaria. La junta de este viernes, sin asistencia física, contó con un cuórum del 66,26%. Todas las propuestas del orden del día han sido aprobadas por mayoría.