Grecia ha ido este fin de semana a las urnas y ha votado un gran cambio en la composición del parlamento y del Gobierno. El partido conservador Nueva Democracia, liderado por Kyriakos Mitsotakis, ganó los comicios con el 39,58% de los votos. Algo que contrasta con la fuerte derrota que sufrió esta formación en las anteriores elecciones en 2015. Pero esta vez el 'perdedor' ha sido precisamente el primer ministro heleno saliente, Alexis Tsipras. Su partido, Syriza, ha recabado 'solo' el 31,53% de los votos, lo que le da 86 escaños.
Por tanto, Nueva Democracia ha logrado la mayoría absoluta en el parlamento griego, en parte gracias a que la ley electoral del país otorga 50 escaños más al partido 'ganador'. En total, tendrá 158 asientos de los 300 que componen la única cámara del parlamento heleno.
La primera mayoría absoluta desde 2009
Mitsotakis ha conseguido la primera mayoría absoluta en Grecia desde 2009. Es decir, desde que comenzó la crisis económica global que golpeó con especial dureza al país heleno.
Estos resultados electorales provocaron que la prima de riesgo griega, que mide el diferencial entre su deuda soberana y la alemana, fuera la única que cayera este lunes en el mercado de renta fija. Actualmente se sitúa por debajo de los 250 puntos básicos, por lo que está relativamente cerca de la prima de riesgo italiana (cerca de los 210 puntos básicos).
Ello se debe a la 'buena sensación' que, por un lado, causa la salida del Ejecutivo de Syriza, un partido percibido como populista por la mayoría de los analistas; y, por otro, la entrada de los liberales al Gobierno con una mayoría absoluta. O lo que es lo mismo, estable.
Caída de Syriza y Aurora Dorada
La 'caída' del partido de Tsipras ya era previsible desde las elecciones europeas del pasado 26 de mayo. Precisamente el primer ministro saliente adelantó las elecciones generales en Grecia, previstas en un principio para otoño, por los malos resultados en los comicios para el Parlamento Europeo.
También parece que el mercado ve con buenos ojos la salida del partido de ultraderecha Aurora Dorada del parlamento griego, que no ha logrado el 3% de los votos. Este es el nivel mínimo de apoyos que marca la ley electoral de Grecia para que una formación pueda formar parte del parlamento. En las elecciones de 2015, Aurora Dorada se convirtió en la tercera fuerza del país al recabar el 7% de los votos.
Eso sí, la participación en las elecciones griegas ha sido una de las más bajas de la historia del país: solo el 57% de los votantes acudieron a las urnas.
Un programa marcado por los recortes de impuestos
Con todo, de la clara victoria de Nueva Democracia se puede deducir que Mitsotakis ha ganado por su programa económico. Este tiene como idea base una bajada de los impuestos, sobre todo los empresariales, para atraer inversiones y fomentar el crecimiento.
En concreto, Kyriakos Mitsotakis cree que hay suficiente espacio en el país para reducir no solo la carga impositiva, sino también las cotizaciones a la Seguridad Social, a pesar de que el margen financiero es muy limitado.
En su campaña, el nuevo primer ministro griego defendió una caída de ocho punto del impuesto de sociedades (al 20%) en dos años, y de cinco puntos en las cotizaciones (al 15%).
Asimismo, Mitsotakis prometió una reducción del tipo mínimo del impuesto sobre la renta física en nada menos que 13 puntos (del 22% al 9%) para los ingresos que no superen los 10.000 euros.
Eso sí, el líder de Nueva Democracia no ha hablado del coste que tendrán todas estas medidas, si finalmente se llevan a cabo. Pero defiende que el mero hecho de adoptarlas dará un gran impulso a las inversiones y a la economía en Grecia.
Así, Mitsotakis cuenta con que en los próximos años las inversiones privadas sumarán al menos 50.000 millones de euros, que esto llevará a la creación de medio millón de empleos "de calidad" y a un crecimiento económico de hasta un 4% anual, más del doble que en la actualidad. Según los últimos datos oficiales, el producto interior bruto (PIB) de Grecia aumentó un 0,2% en el primer trimestre del año.

Su política económica "no diferirá mucho" de la de Tsipras
Sin embargo, los analistas no están convencidos de que la economía griega vaya a cambiar mucho su rumbo con el Ejecutivo de Nueva Democracia. "Aunque Mitsotakis ha prometido recortes de impuestos y mayores inversiones, la política económica probablemente no diferirá mucho de la existente, debido al acuerdo entre Tsipras y los acreedores del país", aseguran los analistas de Danske Bank.
"Aunque Mitsotakis ha prometido recortes de impuestos y mayores inversiones, la política económica probablemente no diferirá mucho de la existente"
Los recortes fiscales del nuevo Gobierno conservador, prometidos por Mitsosakis, se sumarían a las que el parlamento griego aprobó en mayo por iniciativa del Ejecutivo de Tsipras. Entre otras cosas, el impuesto corporativo se reduciría en 2021 del 28% al 25% actual. Ahora Mitsotakis promete reducirlo otros cinco puntos porcentuales.
Advertencia del Banco de Grecia
Ello a pesar de que, precisamente por las rebajas de impuestos sacadas adelante por Tsipras, el banco central griego advirtió a principios de mes que el país no cumplirá este año con los objetivos fiscales acordados con los acreedores para el periodo postrescate.
Grecia superó en agosto de 2018 su tercer rescate financiero internacional y hasta ahora ha superado los objetivos pactados. Entre estos, la obligación del país heleno de alcanzar un superávit primario (antes del pago de intereses) del 3,5% de su PIB hasta 2022, y del 2,2% hasta 2060.
Sin embargo, en su último informe semestral, el Banco de Grecia aseguró que el superávit primario alcanzará solo el 2,9% del PIB a cierre de 2019. "Los retrasos en la aplicación de las reformas o su revocación tendrán efectos negativos sobre el empresariado y sobre la actividad económica", apuntaba en su documento.
Una cumplimiento con los acreedores que podría ser mayor si los conservadores llevan a cabo las rebajas de impuestos prometidas en campaña. El riesgo se produce por la previsible reducción de los ingresos del Estado griego a corto plazo, como coinciden en señalar los analistas.
El plan inicial de Mitsotakis era renegociar los objetivos con los acreedores. Una iniciativa para la que contaba con el apoyo explícito del alemán Manfred Weber cuando este era candidato a presidir la Comisión Europea. Finalmente ese cargo lo ocupará Ursula Von der Leyen, por lo que ya no está tan claro que el nuevo primer ministro heleno pueda llevar tan fácilmente a cabo sus planes.
Todo dependerá de los presupuestos
"En teoría el programa de Nueva Democracia no pone en peligro el cumplimiento de los objetivos fiscales. Sin embargo, es muy temprano para pronunciarse porque todo dependerá de cómo va la ejecución de los presupuestos del Estado en este año", señaló a EFE el catedrático de Economía en la universidad de Atenas, Panayiotis Petrakis.
"Todo dependerá de cómo va la ejecución de los presupuestos del Estado en este año"
Este catedrático cree que la reducción del peso impositivo contribuirá a acelerar el crecimiento de la economía, aunque "su impacto será limitado", es decir, que el 4% quizás sea un objetivo demasiado ambicioso.
A su juicio, la economía podrá cobrar realmente fuerza si Mitsotakis logra que los acreedores acepten reducir el objetivo para el superávit primario.
Aunque las primeras reacciones de las instituciones europeas (antes de las elecciones) han sido negativas, Petrakis no excluye que haya un acuerdo a este respecto, siempre y cuando la sostenibilidad de la deuda no se vea afectada.
Otro frente: la reforma de las pensiones
Otro asunto que pone en riesgo los planes del nuevo jefe de Gobierno afecta a la última reforma de las pensiones, contra la que varias asociaciones de jubilados han presentado una demanda de inconstitucionalidad.
En el caso de que el Tribunal Supremo Administrativo griego la declarara anticonstitucional (no sería la primera vez que esta corte falla a favor de los demandantes en este tipo de querellas), el Estado tendrá que devolver a los jubilados entre 4.000 y 15.000 millones de euros, según los expertos.
"Una reducción de las cotizaciones provocaría forzosamente un recorte de las pensiones"
Por ello, uno de los puntos más problemáticos del programa de Mitsotakis es, según los analistas, el que contempla bajar las cotizaciones a la Seguridad Social en cinco puntos ya que "actualmente la caja de pensiones no dispone de reservas", como recuerda Vaguelis Kumarianós, economista de la universidad Panteion de Atenas especializado en seguridad social.
"Una reducción de las cotizaciones provocaría forzosamente un recorte de las pensiones", alerta este experto. Con todo, Mitsotakis entra este martes en el Gobierno con la intención de coger y enderezar el timón de la recuperación económica en Grecia. Pero, visto lo visto, no lo tendrá nada fácil.