La ministra de Economía, Nadia Calviño, ha anunciado una rebaja en las previsiones económicas del Gobierno de siete décimas para este año. El nuevo cuadro incluye un incremento del PIB del 6,5% frente al 7,2% anterior. No obstante, la economía aumentará su crecimiento en 2022 hasta el 7%. La ministra ha dicho que habrá una recuperación completa del PIB a finales de del año que viene en línea con una V asimétrica y también ha adelantado una mejora de la tasa de paro.
La titular de Economía ha indicado que la recuperación se retrasa un trimestre, si bien el saldo conjunto de ambos años se mantiene, y que se confirma el patrón de V asimétrica. "Se trata de una previsión prudente, realista y muy alineada con los pronósticos de los analistas nacionales e internacionales", ha afirmado la ministra.
En el apartado del paro, Calviño ha recortado en 1,7 puntos la tasa de paro para este año, al 15,2%, mientras que para 2022 prevé que se sitúe en el 14,1%. A su juicio, las medidas de protección han permitido romper la relación tradicional entre contracción económica y destrucción de empleo. "No se ha registrado una caída tan abrupta del empleo como en crisis anteriores", ha apuntado.
Preguntada a qué se debe esta mejora del mercado laboral, la ministra ha indicado que prevén una extensión de los sistemas de cobertura. "En las próximas semanas seguirán las negociaciones con los agentes sociales", ha recordado Calviño, que ha dejado entrever que se incentivará las reincorporaciones de las personas en Erte. La titular de Trabajo, Yolanda Díaz, ya anunció que esta medida se iba a prolongar más allá de mayo en similares condiciones.
Previsiones en presupuestos caen en papel mojado
Al Gobierno las anteriores previsiones del pasado mes de octubre que le sirvieron para elaborar los presupuestos de 2021 se han quedado en papel mojado por la lentitud en el despliegue de la vacunas, que obliga a mantener restricciones y mantener al ralentí al sector turístico en mínimos y el retraso para que lleguen la totalidad de los fondos europeos prometidos. Economía manejaba anteriormente un escenario de que el crecimiento se iba a disparar al 9,8% este año gracias a la inyección de inversiones europeas.
A España han llegado solo parcialmente las ayudas para pagar los Ertes. El retraso de los fondos europeos también han tenido que ver en esta revisión a la baja. Economía esperaba que este año alcanzar los 27.000 millones de euros de inversiones procedentes de Europa.
Las nuevas cuentas del Ejecutivo serán los ejes del nuevo Plan de Estabilidad que será remitido a Bruselas la próxima semana, que incluirán las propuestas de inversiones para aprovechar el fondo de reconstrucción europeo. "Ahora ya no tenemos dos escenarios (...) la previsión del 6,5 % incorpora todos los elementos", ha explicado Calviño.
Calviño ha reconocido también que la evolución de la recuperación también dependerá del daño que termine haciendo la pandemia al tejido productivo. La ministra ha indicado que espera ver reducido este impacto por las medidas desplegadas por el Gobierno en apoyo a las empresas, como las ayudas directas recientemente aprobadas o y el mantenimiento de los ERTE. La ministra confía que el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia, que debe servir para canalizar los fondos europeos, sea una "oportunidad única" y "diferencial" para cerrar la brecha de crecimiento con el resto de Europa.
Banco de España, FMI...
El Gobierno ha decido revisar su cuadro después de que varias instituciones como el Banco de España o el BCE hayan planteado un escenario más complejo para la recuperación que se espera para este año, teniendo en cuenta que con casi toda seguridad en el primer trimestre del año el PIB volverá a caer y se confirmará una recesión técnica para la economía española y europea. Los problemas que están surgiendo para alcanzar el objetivo de personas vacunadas tanto dentro de España, como fuera del país, están dificultando que se materialice la esperada recuperación económica.
De hecho el Banco de España, empeoró sus previsiones para este año al retrasar el inicio de la recuperación al segundo semestre. En concreto, pronosticó un crecimiento del 6%, tras rebajar en ocho décimas hasta el 6%. La institución dio por perdida la primera mitad del año y esperan que las vacunas permitan la retirada gradual de las medidas de contención, hasta su desaparición prácticamente plena a finales del ejercicio. Las nueva previsiones de Calviño se mueven en el escenario más favorable que maneja el Banco de España y que está lleno de optimismo. No obstante, la institución dirigida por Pablo Hernández de Cos tiene fijado la recuperación de los niveles precovid para el PIB entrado ya 2023.
Los últimos en pronunciarse han sido Funcas y la AIReF. Este último rebajaba su previsión de crecimiento económico en 2021 hasta el 6,6%. Más duro ha sido el panel de las cajas de ahorro, que ha recortado su cálculo para este año en cuatro décimas, hasta el 5,9%.
El BCE también en sus previsiones de marzo dibujó un escenario parecido para la economía europea pese a que mejoró ligeramente su perspectiva. Pero confirmó que entre enero y marzo la economía volvió a caer. Ayer, en las actas de la reunión todavía los miembros del Consejo de Gobierno dibujaron un panorama más sombrío desplazando el inicio de la recuperación para más allá del verano.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, adelantó este martes que la revisión del PIB español iría a la baja, acercándose a la revisión del FMI. En ese rueda de prensa, el jefe del Ejecutivo destacó que el FMI ha elevado al alza en medio punto su estimación de crecimiento para este año, hasta el 6,4%, "lo que convierte a España, junto con EEUU, en la economía desarrollada que más va a crecer en 2021", dijo.