La publicación de las cuentas anuales de las compañías automovilísticas más grandes del planeta ha vuelto a sacar a la luz las grandes paradojas a las que se enfrenta un sector que sigue en el centro de todas las miradas ante la continua amenaza de interrupción de la cadena de suministro, la evolución de la implantación del coche eléctrico y la regulación a nivel mundial.