La tecnología es el gran campo de batalla mundial en la disputa de la hegemonía del futuro. EEUU y China llevan años siendo los dos grandes protagonistas de la pelea, que ha llegado a convertirse en una guerra comercial con acusaciones de espionaje y robo de patentes entre otras cuestiones. Pero el gigante asiático está decidido a salir victorioso y su inversión en investigación y desarrollo (I+D) es cada vez mayor.
