Cuando Javier Milei ganó las elecciones presidenciales en Argentina, dejó claro que tenía un objetivo innegociable: cuadrar las cuentas del Estado y así no tener que imprimir más dinero público para compensar el déficit. La teoría económica apunta a que la principal causa de la inflación es esa creación constante de dinero, y la primera condición para detener el alza de precios es poner fin a ese ciclo. Y para ello, el presidente ha sacado la motosierra, recortando el gasto costara lo que costara. Y las principales víctimas han sido los jubilados, que no han visto revalorizada su pensión con el IPC, y la educación, que ha visto su partida casi evaporarse: un 95% menos.

Redactor de Internacional. Aprendí a cubrir economía en Argentina, aunque mi pasión siempre ha estado en Reino Unido y EEUU, en las que me centro actualmente, porque si algo no son precisamente estos dos países es aburridos. Estudio sobre el bitcoin y el universo de ideas y fraudes que ha crecido alrededor en mis ratos libres.