En la política, es habitual que existan las puertas giratorias: un alto cargo que abandona el Gobierno y se va a trabajar para un 'lobby' o un gigante del sector relacionado con su antiguo puesto, aprovechando su agenda de contactos para ayudar a sus nuevos jefes a conseguir contratos o abrir líneas de comunicación con los nuevos responsables estatales. Pero lo ocurrido esta semana en EEUU probablemente se sale de los márgenes normales. ¿Qué pasa cuando el que fuera ministro de Hacienda de Donald Trump y su regulador bancario se compran un banco?

Redactor de Internacional. Aprendí a cubrir economía en Argentina, aunque mi pasión siempre ha estado en Reino Unido y EEUU, en las que me centro actualmente, porque si algo no son precisamente estos dos países es aburridos. Estudio sobre el bitcoin y el universo de ideas y fraudes que ha crecido alrededor en mis ratos libres.