Redactor de Internacional. Aprendí a cubrir economía en Argentina, aunque mi pasión siempre ha estado en Reino Unido y EEUU, en las que me centro actualmente, porque si algo no son precisamente estos dos países es aburridos. Estudio sobre el bitcoin y el universo de ideas y fraudes que ha crecido alrededor en mis ratos libres.

Tras semanas de arduas negociaciones, el programa de infraestructuras impulsado por el presidente de EEUU, Joe Biden, se acerca al momento decisivo. El grupo de republicanos que debate los contenidos con la mayoría demócrata anunció que habían llegado a un acuerdo para aprobar un paquete de 550.000 millones de dólares en los próximos días.

Las negociaciones entre Bruselas y Londres por el acuerdo del Brexit han tomado un giro duro en los últimos meses. El Gobierno de Boris Johnson ha desatado la 'Guerra de las Salchichas", actualmente en una tregua veraniega, y quiere renegociar la parte del tratado que afecta a Irlanda del Norte. Y la UE ha respondido tomando un 'rehén' en las negociaciones: la pertenencia del Reino Unido a la Convención de Lugano, que permite celebrar juicios por asuntos comerciales en terceros países, y que le daba ingresos multimillonarios a la economía británica.

Casas que se compran sin que los interesados vayan a visitarla, no sea que alguien se la lleve antes. Pujas al alza que acaban subiendo el precio de un piso en 50.000 dólares o más frente a la oferta inicial del vendedor. La vivienda está enloquecida en EEUU y sigue batiendo récords. Los precios subieron un 17% en mayo, según los datos publicados hoy, la mayor subida desde 1988, y marca ya 13 meses de subidas ininterrumpidas.

Comienza una nueva semana movida para el bitcoin, con el tether de nuevo como protagonista. Según reveló la agencia Bloomberg, el Departamento de Justicia de EEUU está investigando a la empresa que emite esta criptomoneda, que dice equivaler a un dólar y que es la más usada en el mundo a día de hoy. Una investigación que se suma a la de la Fiscalía de Nueva York, que multó a su emisora, la casa de cambios Bitfinex, con 18 millones de dólares por irregularidades en sus cuentas.

Los reguladores están cada vez más preocupados por las criptomonedas, y el presidente de la Fed, Jerome Powell, advirtió en su discurso de este miércoles que las primeras medidas pueden estar a la vuelta de la esquina. En un apartado de su declaración ante el Congreso, Powell habló sobre los riesgos de las 'stablecoins', criptomonedas cuyo valor está atado al dólar, con el tether como la más famosa del grupo; y dejó la puerta abierta a crear una criptomoneda oficial.

El desorbitado gasto público forzado por la pandemia ya ha dejado un perdedor en el Reino Unido: el presupuesto de ayuda al desarrollo internacional. El Parlamento británico ha aprobado este martes, por 333 a 298 votos, recortar las aportaciones e inversiones en países pobres en unos 5.000 millones de libras anuales, unos 23.420 millones de euros en esta legislatura.

El Gobierno de Reino Unido ya no va a obligar, ni exigir, ni multar a nadie en Inglaterra para mantener las medidas sanitarias de control del coronavirus. El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció este lunes que todas las restricciones legales desaparecerán de golpe desde el próximo 19 de julio en el mayor de los cuatro estados del país.

Cuando parecía que ya se había terminado, vuelve la tradición que Reino Unido y la UE llevan repitiendo desde hace años. Este miércoles, Bruselas y Londres van a firmar una prórroga de tres meses a las cláusulas del acuerdo comercial entre ambas partes que caducaban este 30 de junio. En el último momento, como es ya costumbre, la UE ha aceptado dar una tregua a la "Guerra de las salchichas" a cambio de concesiones británicas y un calendario para negociar un acuerdo permanente.

La 'Guerra de las salchichas' entre la UE y Reino Unido está a punto de tomarse una tregua veraniega. Bruselas está estudiando extender la fecha a partir de la cual quedaría prohibida la importación de carne fresca en Irlanda del Norte, prevista para este 30 de junio. Un movimiento solicitado por Londres y que la UE espera que sirva para negociar un acuerdo permanente. En otras palabras, como con el acuerdo de salida del Brexit, pero aplicadoe sta vez a los supermercados.

Desde que Nicolás Maduro llegó al poder en Venezuela, en 2013, hay un dato que todavía no ha sido capaz de lograr: conseguir cerrar un solo año con un crecimiento positivo del PIB del país que controla. La nación caribeña lleva sumida casi una década en una recesión perpetua, aplastada por las nacionalizaciones, los controles de precios y las restricciones a la empresa privada aprobadas por su predecesor, Hugo Chávez, y endurecidas por él. A eso se le añade el hundimiento del petróleo en los últimos años, la suspensión de pagos de la deuda y la hiperinflación por la falta de productos. Y, como guinda en el pastel, las sanciones de EEUU aprobadas por Donald Trump en 2018. Pero, tras tocar fondo, el país está empezando a arrastrarse lentamente fuera del hoyo: los analistas esperan que este sea el primer año con un aumento del PIB desde que Maduro está en el poder, en parte gracias a las tímidas reformas que se ha visto obligado a implantar su Gobierno.