Correlación no implica causalidad. Vicente Nieves lleva buscando explicaciones a los movimientos de los mercados y de la economía desde la crisis financiera de 2007. Aún no tiene la respuesta.
Economía

Las bolsas están en máximos históricos, la economía sigue creciendo con fuerza en EEUU y las negociaciones con China van por buen camino. Sin embargo, en Wall Street se huele el miedo a lo que pueda pasar este mes de diciembre en el mercado monetario. Las tensiones sufridas en septiembre en el mercado de 'repos' (operaciones de recompra de activos) llevaron los tipos en este mercado a alcanzar el 10%, alejando alejando el tipo efectivo del objetivo que marca la Fed. Ahora se repiten los factores que provocaron ese shock, con la diferencia de que la Fed está inyectando grandes cantidades de liquidez de forma mensual y mantiene abierta las subastas diarias de liquidez. No obstante, los inversores ven con miedo la reproducción de estas tensiones, causadas por un aumento de la demanda de liquidez, que en septiembre provocaron fuertes turbulencias en las bolsas.

Política monetaria

Christine Lagarde se ha estrenado en la presidencia del Banco Central Europeo (BCE) flanqueada por el vicepresidente de la institución, el español Luis de Guindos, como venía siendo habitual, aunque se rumoreaba que iba a estar presente el economista jefe Philip Lane. Además, este estreno ha venido acompañado de buenas noticias o al menos no tan negativas como en pasadas reuniones de política monetaria. Lagarde ha anunciado que la desaceleración de la economía podría estar tocando fondo en la zona euro y que la inflación subyacente estaría mostrando una leve mejoría. Pero su gran anuncio ha sido la revisión del mandato del BCE, después de 16 años sin tocarse, buscando dar un tono más social al objetivo del banco, que seguirá siendo la estabilidad de precios, pero que tendrá en cuenta asuntos como el cambio climático o la desigualdad.

Materias primas

Desde el mes de noviembre, los futuros del petróleo Brent (de referencia en Europa) cotizan en un rango que va de los 60 a los 64 dólares. El pasado 6 de diciembre la OPEP anunció un recorte de la producción de 500.000 barriles más por día, que se sumaban a los recortes anunciados en 2018 de 1,2 millones de barriles diarios (mbd). Pese a este esfuerzo, el petróleo sigue cotizando hoy dentro de esa horquilla. Las subidas desde la reunión en Viena han sido leves porque el movimiento de la OPEP no compensará ni de lejos la sobreoferta que se espera durante la primera parte de 2020. Además, las dudas sobre el cumplimiento de los nuevos recortes no son pocas. Por ejemplo, Arabia Saudí (país que soportará el mayor peso relativo de las restricciones) ha puesto como condición el cumplimiento estricto de los demás firmantes, algo que no suele suceder.

El problema catalán

Todavía no es una estrella de rock. Por eso, Thomas Piketty pide disculpas por el retraso que ha sufrido su avión a Madrid, un daño colateral de las huelgas que están teniendo lugar en Francia y de la niebla que campó ayer por la mañana en la capital española. Camisa azul y rostro radiante, el economista francés superventas -en España su nuevo libro ya lleva más de 4.000 ejemplares vendidos- defiende con convicción las ideas plasmadas en Capital e ideología. Reconoce que se trata de "un libro optimista que intenta aprender de la historia". En su apasionada lucha contra la desigualdad, que despliega en este encuentro como un torbellino de palabras e ideas encadenadas casi sin respirar, Piketty recuerda que ha habido períodos en los que la desigualdad decreció en el mundo, y anima a abrir un debate libre de tecnicismos que conduzcan a un auténtico cambio. Después de todo, este economista concibe su campo de estudio como "una ciencia moral y social".

Economía

Llegado el mes de diciembre de cada año, los economistas del banco danés Saxo Bank publican una lista de diez eventos económicos para el siguiente año que no aparecen entre las previsiones de las instituciones financieras. Estos eventos se suelen denominar cisnes negros. Una de esas descabelladas predicciones realizadas a finales de 2018, con vistas a este año, ha estado a punto de hacerse realidad: la entrada de Alemania en recesión. La incertidumbre generalizada y el estancamiento del comercio internacional han dejado a la producción germana muy cerca de presentar descensos en dos trimestres consecutivos, algo que finalmente no ha ocurrido.

Impuestos y cotizaciones sociales

Echando la vista atrás unas cuantas décadas, la presión fiscal en España se ha multiplicado por dos desde 1965, primer año disponible en la base de datos de la OCDE. De una forma progresiva, la recaudación de impuestos y cotizaciones sociales ha ido ganando peso sobre el PIB hasta la crisis económica de 2007, cuando se observó una caída de la que aún no se han recuperado. Aún así, este indicador sigue cerca de máximos históricos. La presión fiscal en 2018 ha sido del 34,4% del PIB (unos 415.700 millones de euros), superando la media de la OCDE por primera vez desde la crisis. Las cotizaciones a la Seguridad Social han sido el mayor contribuyente recaudatorio, representando el 11,6% del PIB y el 34% de toda la recaudación. A pesar de esta subida, la presión fiscal en España aún se encuentra más de diez puntos por debajo de la de Francia y Dinamarca, países que lideran la clasificación, y también lejos de la zona euro, que se encuentra en el 41% del PIB.