La pandemia de la Covid-19 ha supuesto un antes y un después en la forma en que nos relacionamos, consumimos, nos informamos, a lo largo y ancho del planeta. Un cambio de paradigma y de mentalidad con un claro denominador común: la digitalización. Un proceso que ya estaba en marcha, pero que se ha visto acelerado por los retos que planteaba una realidad que era casi ciencia ficción.