
La transformación hacia un modelo energético más verde, apoyando e impulsando el uso de energías renovables, es clave para detener el cambio climático, uno de los mayores retos a los que nos enfrentamos en la actualidad.
El observatorio sobre Electrificación y redes, organizado por El Economista y patrocinado por Endesa, ha reunido a representantes del sector energético con el objetivo de hablar del papel del sector eléctrico en este cambio de modelo. Y la conclusión es unánime: la electricidad es la palanca de transformación e integración de las renovables.
La Ley de Cambio climático y transición energética prevé una reducción de las emisiones para 2050, y "la electricidad es el vector esencial para conseguirlo", afirma Paloma Sevilla, Directora general de la Asociación Española de Empresas de Energía Eléctrica (AELEC), "Es el que más ha demostrado que puede integrar las fuentes renovables, lo que nos va a hacer llegar a esa neutralidad climática". Unas fuentes renovables maduras, como son las eléctricas, son más eficientes y, por tanto, pueden ofrecer precios más asequibles. La electrificación es la vía más efectiva para alcanzar la descarbonización, y son las grandes empresas eléctricas las más preparadas para dar respuesta a esta necesidad. "Hay que actuar tanto en la generación como en el consumo", afirma Sevilla, "por lo tanto, lo que nos está enlazando son las redes".
La importancia de las redes
Para las empresas energéticas esto supone un cambio en la forma en que se trabaja: ya no solo se instalan las redes, sino que hay que hacer un trabajo de digitalización y gestión. Una evolución de un modelo unidireccional a otro bidireccional. Íñigo Segura, CEO de Zigor, señala que "hablamos de una generación cada vez más distribuida, por lo que hablamos también de una generación más impredecible". Teniendo en cuenta que la demanda va en aumento, serán imprescindibles las herramientas de gestión. Y el timing es importante. "No podemos hacer transiciones abruptas ni podemos quedarnos esperando que todo ocurra y que la red no haya evolucionado".
"Debemos estar preparados para la vorágine de las renovables". José Manuel Revuelta, Director General de Infraetructuras y Redes de Endesa
Para Ángel Colmenarejo, Director Comercial de Iberia de Arteche, la automatización de las redes es clave. "Se nos plantean tres grandes retos: la gestión y la operación avanzada de la red, es decir, automatizarla para su óptima gestión, lo que lleva a dotar a estas redes de sistemas inteligentes y seguros". "Nuestro reto es poner esa tecnología al servicio de la sociedad", dice Jorge Haya, Director Comercial Power Grid Automation de Ingeteam.
"Hay que fortalecer las redes eléctricas y hay que dotarlas de flexibilidad y digitalización". Además hay que fijarse en los nuevos modelos de negocio a la hora de ofrecer soluciones tecnológicas, y para ello es necesario el talento humano. Para Francisco Javier López, de la Junta Directiva de ASEME, el papel de las distribuidoras es clave como garantes de la gestión de las redes eléctricas: "Vamos a ser gestores de una red. Tenemos que ser capaces de ser eficaces en las diferentes tecnologías y agentes que se van a conectar a nuestra red". Para ASEME, la digitalización es el medio que permitirá alcanzar los objetivos 2030 y 2050 en materia energética. Y traslada la preocupación por el requerimiento de inversión en tecnologías que quizá en 5 años estén obsoletas.
"Hay proyectos que se tardan más en tramitar que en ejecutar" Paloma Sevilla, Directora general de AELEC
"No podemos fallar", afirma José Manuel Revuelta, director general de Infraestructuras y Redes de Endesa, "De nuestro éxito dependen aspectos críticos para el país". Un ejemplo ha sido la erupción del volcán de La Palma, donde se ha logrado mantener el suministro de la isla en una situación crítica. El reto ahora es la reconstrucción: "Tenemos que asegurarnos de que si esta gente vuelve la semana que viene a sus casas, tengan luz", apunta Revuelta, para quien, ante una crecimiento cada vez mayor de la demanda, los distribuidores tendrán que responder con nuevas redes y más flexibilidad, atendiendo siempre a la calidad, porque todo pasará por ellas. "Un consumidor doméstico, cuando esté completamente electrificado, puede estar multiplicando su consumo eléctrico por 2 o por 3". Y la factura deberá adaptarse a estas nuevas necesidades.
Financiación
Los ponentes coinciden en que hay que focalizar los esfuerzos de inversión en unos puntos concretos. Uno de ellos es la gestión avanzada de las redes, aprovechando los millones de datos que aporta su monitorización. Para ello es necesaria la digitalización y la implementación de tecnologías que ayuden a hacerlas más inteligentes.
Sobre este punto José Manuel Revuelta destaca el proyecto para crear un gemelo digital que supone "meter toda nuestra red, con todos sus elementos, en el ordenador, para que se pueda consultar en cualquier momento, realizar geolocalizaciones de cualquier apoyo e infraestructura: son herramientas que permiten hacer accesible desde tu sitio una red de casi 320.000 km". Estas herramientas hacen también posible adelantarse a fenómenos meteorológicos que, debido al cambio climático, son cada vez más frecuentes, la automatización de la gestión de las incidencias, y un largo etcétera que afecta a la gestión de la red, pero también a la gestión del cliente. Endesa invertirá en las redes eléctricas 2.900 millones en el período 2022-24. "Son niveles de inversión relevantes. Hay que trasladarlas a un beneficio tangible para el cliente y para la sociedad.", apunta Revuelta.
"Hablamos de tecnologías nuevas que requieren una planificación " Íñigo Segura, CEO de Zigor
"Las inversiones están ayudando a empresas a desarrollar tecnología," dice Íñigo Segura, "que luego después se exporta y hace que compañías, de la mano de esas inversiones y esos clientes, podamos desarrollar productos que nos permitan luego posicionarnos como referentes en otros mercados."
"Ha habido modificaciones en los modelos de retribución que se ven reflejadas en inversiones asociadas a la digitalización", dice Ángel Colmenarejo. Y recuerda que las empresas de componentes trabajan en "proyectos con nombres y apellidos".
Franciso Javier López señala que, en el caso de los distribuidores, hay un cambio de mentalidad hacia la conversión en gestores, tanto de la red como del dato y de los recursos. "Tenemos que dar unas respuestas rápidas, contundentes, viables y seguras a un escenario de país que es crítico". Se trata de una responsabilidad que tienen tanto las grandes corporaciones como las empresas más pequeñas: "Este no es un coste de empresa, este es un coste de país." Y lamenta que las retribuciones a día de hoy premien por tener el activo en posesión.
"Necesitamos personas con talento y conocimiento" Jorge Haya, Dir. Comercial Power Grid Automation de Ingeteam
Para los tecnólogos, como señala Jorge Haya, las inversiones de las distribuidoras sirven como tractores, buscando cuáles serán las que ayudarán al avance en la transición. "La velocidad de crucero a la que vamos no la hemos visto en la vida", afirma.
Paloma Sevilla, por su parte, considera imprescindible que se contemple en el modelo retributivo.
Contra el fraude, regulación
La digitalización está siendo también un aliado en la lucha contra uno de los problemas cotidianos en la gestión de redes: el fraude. Un caso concreto, como explica Revuelta, es el de las plantaciones ilegales de marihuana, asociadas a grupos de delincuencia organizada que encuentran en la legislación española menos penas para los delitos de fraude energético -aquí se consideran faltas leves- comparadas con las de nuestros vecinos europeos, lo que provoca un efecto llamada. "Hasta el punto de que el volumen de fraude asociado a las plantaciones de marihuana puede alcanzar el equivalente al consumo de Palma de Mallorca", apunta. "El fraude se está profesionalizando", asegura Revuelta. El efecto disuasorio de las penas, generalmente bajas, no existe. En cambio, la capacidad de adaptación y reestructuración de las organizaciones que llevan a cabo dicho fraude es muy superior a la capacidad de respuesta por parte de las empresas proveedoras o distribuidoras de energía, así como la de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. Sin el apoyo de la normativa, es decir, de las administraciones, la pelea está perdida.
Los Next Generation EU
Los fondos europeos siguen siendo una esperanza para el sector, pero existen también reservas. Hay optimismo por su aprobación, pues suponen una inyección necesaria para llevar a cabo cambios sustanciales en el modelo, pero al mismo tiempo hay cierta inquietud por no saber cuándo llegarán. Íñigo Segura habla de oportunidad, pero a la vez de un freno en la inversión: "Hay una tendencia a esperar a que lleguen los fondos para acometer una serie de proyectos; si los fondos no llegan, lo que estamos haciendo es paralizar la inversión". Estos fondos, en su opinión, tienen un valor fundamental a la hora de financiar inversiones que suponen un gran riesgo, pero debería haber una transparencia en el debate, que la información se traslade también a la ciudadanía, y una negociación para compartir el coste de la transformación de forma equitativa.
"Hay que evitar peldaños o barreras en esta transición" Fco Javier López, miembro de la Junta Directiva de ASEME
Por su parte, Francisco Javier López afirma que "No es que no vayan a llegar, es que no sabemos cuándo. Por contrapartida estamos vinculando muchas de las acciones que se nos demandan como sector en este tipo de ayudas que se nos dijo que iban a ser facilitadoras". Porque, si bien muchas acciones van a llevarse a cabo porque el sector está comprometido, hay que tener presente si después podrán hacer frente a los cambios planificados, para lo que los fondos Next Generation son fundamentales.
"Son grandísimas bolsas de dinero. Hay que ver cuando llegan. Sí se están desbloqueando algunos temas, como el del vehículo eléctrico; hay algo de movimiento. Pero hay que ver cómo es el despliegue en toda la cadena", apunta Jorge Haya. Y recuerda que el límite a la inversión es un problema para poder fortalecer y desarrollar adecuadamente las redes.
"La digitalización de las redes lleva un beneficio para la sociedad" Ángel Colmenarejo, Director Comercial de Iberia Arteche
Ángel Colmenarejo, que coincide en la importancia de cómo se repartirán los fondos entre los distintos agentes, pone también una nota de optimismo: "Tenemos muy claros los planos a largo y a medio plazo, es decir, sabemos dónde queremos llegar a nivel de inversión en redes y de descarbonización. Esto es lo más difícil, y lo tenemos muy claro. Los fondos están, lo que nos hace falta es que en el corto plazo se repartan adecuadamente y que podamos llegar al objetivo que tenemos muy claro en todo el sector".
Paloma Sevilla pone números sobre la mesa: el 47% de la inversión de estos fondos Next Generation está ligado a digitalización y descarbonización, que es precisamente el objetivo del sector en cuanto a la transformación de las redes de distribución: "Todas las inversiones en redes, hasta ese 47% de tope, están alineadas en capturar el máximo de estos fondos".
En lo que todos los ponentes coinciden es en la capacidad de las redes españolas y el tejido empresarial para hacer frente a la transición y la integración de las energías renovables.