La prioridad de la mayoría de las empresas tras el impacto de la crisis del Covid-19 es garantizar la continuidad del negocio, lo cual empieza por asegurar la salud y el bienestar de los empleados, al tiempo que se atienden las necesidades urgentes de carácter financiero y operativo. Sin embargo, este foco en la supervivencia no será suficiente a medio-largo plazo: hay que aprovechar la oportunidad única que ofrece esta crisis para reinventarse, replantear las "reglas del juego" y redefinir la relación con el entorno y la propuesta de valor hacia clientes y empleados.

Presidente del grupo de trabajo de Liderazgo y Talento del Círculo de Empresarios y socio director de WALK