Profesor de la Universidad Complutense de Madrid
Fernando Méndez Ibisate

Las autoridades y varios economistas, entre los que destaca Kenneth Rogoff, han propuesto acabar con nuestro actual sistema de pagos de monedas y billetes, en adelante efectivo, como forma de lucha contra la economía sumergida y la evasión fiscal, la corrupción y hasta, dicen, el tráfico delictivo (drogas, personas...), para sustituirlo por formas de pago electrónicas que, también dicen, son más propias de rastrear.

Fernando Méndez Ibisate

Nuestra baja productividad supone un auténtico punto débil para nuestra economía y no es tanto causa como un síntoma primordial o consecuencia de profundos y enquistados problemas. Y además de persistente es contra-cíclica, por lo que sólo cambios institucionales importantes o en las formas y costumbres de llevar a cabo acuerdos o contratos, realizar negocios y acometer empresas pueden resolver.

Empresas centenarias

Basta mirar una foto o un documental de época: las calles, edificios, vestimentas, vehículos o aperos, hasta el aspecto o estatura de las personas, nos advierten de cómo hemos cambiado en el tiempo. Máxime si nos retrotraemos un siglo (1916) y nos situamos en mitad de una Guerra Mundial en la que, iniciando cierta tradición, España intenta mantenerse neutral y beneficiarse económica e industrialmente.

Fernando Méndez Ibisate

Los dos principales bancos centrales muestran continuidad en sus directrices. Mientras el BCE anunciaba el 9 de marzo el mantenimiento de su política monetaria expansiva, la Fed exhibía, seis días después, más contundencia en su percepción de cambio de contexto y mayor apremio en su decisión de endurecer la política monetaria.

Fernando Méndez Ibisate

Qué dislates hay que soportar y, lo peor de todo, reiterados tras siglos de refutación teórica y evidencia empírica! Desde el propio Bill Gates, que ha propuesto establecer impuestos a los robots para compensar las pérdidas de puestos de trabajo que puedan acarrear y favorecer la formación de trabajadores con dichos tributos, pasando por variopintos analistas de opinión, hemos vuelto a ver resucitar en nuestros medios de comunicación (y otros foráneos) ni más ni menos que las tesis luditas.

Fernando Méndez Ibisate

No sé con exactitud ante qué institución o instancia deben dar cuenta de sus responsabilidades quienes contribuyeron al problema de las cajas de ahorro, que no sólo de Bankia. Tal vez, el ámbito judicial o penal en el que se han visto comprometidos recientemente el exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, el antiguo presidente de la CNMV, Julio Segura, y su entonces vicepresidente, Fernando Restoy, suponga obviar las circunstancias tan críticas y complejas que vivió el sistema financiero en aquéllos momentos peculiares de 2008, y de nuevo en la eurozona, en 2012, que obligaron a tomar medidas y decisiones peculiares y extremas.

Fernando Méndez Ibisate

Hay reformas que, se pongan como se pongan los distintos grupos de interés o ideológicos afectados, son imprescindibles para que nuestra sociedad prospere económicamente y todas van en la dirección de liberalizar más la economía, es decir, que el Estado, las Administraciones Públicas, levanten sus pies de nuestros cuellos.

Fernando Méndez Ibisate

Tienden los poderes públicos a eliminar la competencia, pues el poder, la autoridad, se fundamenta en la coacción, que es lo opuesto a los acuerdos libres y voluntarios entre personas. No digo, ni pretendo, que las organizaciones e instituciones jerárquicas no sean necesarias o precisas, ni que nada aporten. Ejemplo de instituciones jerárquicas son la familia o la empresa, que contienen una peculiar combinación de autoridad o imposición forzada e importantes elementos de acuerdos o contratos libres.

Fernando Méndez Ibisate

No es baladí lo expuesto por Trump en su rueda de prensa, como tampoco lo es lo omitido o eludido, por ejemplo su (no) respuesta a la pregunta directa de si alguno de sus colaboradores tenía o había tenido relación con Rusia, se entiende que por el espionaje o hacking durante la campaña electoral. Puede ser que, como dijo, todo el mundo los hackea, o al menos lo intenta. Pero no es de recibo la actitud ingenua que, sobre tal asunto, muestran los medios y la gente en EEUU o Europa, escandalizados por hechos extendidos, que forman parte de las reglas de "ese" juego y que durante la presidencia de Obama se han utilizado con desenvoltura, naturalidad, complacencia, abundancia y hasta imprudencia.