El sector de la edificación y la construcción es responsable de más del 34% de la demanda de energía y de alrededor de un 37% de las emisiones de dióxido de carbono, tal y como señala el informe Alianza Global para los Edificios y la Construcción (GlobalABC) del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma). Ante esta situación, la sostenibilidad se convierte en un actor principal en la construcción con el fin de lograr edificios eficientes y respetuosos con el medio ambiente en todas las fases de su ciclo de vida. Pero más allá de los aspectos medioambientales, cada vez hay una mayor demanda de factores sociales y relativos a la gobernanza (ESG).