Foment del Treball y otras 18 entidades empresariales catalanas se revuelven contra las intenciones del Gobierno de aprobar la jornada laboral de 37,5 horas. La organización que preside Josep Sánchez Llibre critica la reducción generalizada de la jornada y avisa que, de vez la luz la propuesta, los costes salariales subirán un 7%, lo que implicaría un incremento de la factura laboral de 12.000 millones de euros. “El coste sería escandaloso”, lamentó.