El plan de ajuste anunciado por Basf a nivel mundial todavía no se deja notar en España. No es solo que no se conozcan los despidos que se producirán en el país, es que la compañía pretende crecer en la Península Ibérica con la apertura de dos nuevos hubs de ingeniería europea, que se ubicarán en Madrid y Tarragona –donde tiene su fábrica principal-, con el objetivo de desarrollar proyectos para todo el continente.