La crisis del coronavirus ha marcado el fulgurante ascenso y caída de la empresa castellonense Airnatech Aintiviral. La firma que consiguió instalar una de las mayores fábricas de mascarillas FPP2 en Europa en plena pandemia del Covid 19 y convertir su marca en una de las más reconocidas en toda España, encara ahora su desaparición tras el desplome de las ventas del que hasta hace no tanto tiempo era considerado un producto básico.