El debate alrededor de Ana Obregón tras haberse convertido en madre y abuela a los 68 después de alquilar el vientre de una mujer en Miami para gestar un embrión fecundado con el esperma de su propio hijo, fallecido hace tres años, no para.
El poderío económico de Ana Obregón es inmenso y su desahogada situación le ha permitido correr con los enormes gastos que conlleva alquilar el vientre de una gestante y los tratamientos médicos que el proceso incluye, además de viajes, estancias y costes jurídicos. Además, la actriz ha heredado junto a su hermanos el legado de sus padres, fallecidos hace meses. Sin embargo, hemos podido constatar que algunas empresas de la bióloga están inactivas desde 2015, han reducido sus activos y hasta presentan números rojos por una cantidad nada desdeñable: unos 700.000 euros. Pero ahora, además de el precio de una exclusiva que algunos cifran en torno al millón de euros, "ha logrado multiplicar por cinco el valor de su imagen", según coinciden varios expertos que incluyen en su valoración la actualización de sus cachés como actriz, influencer, miembro de jurado en programas o simple contertulia, además, claro está, de cara a futuras exclusivas que pueden estar ya pactadas, como el primero posado en casa con su nieta, el bautizo u otros acontecimientos.
"Éramos pocos y 'parió' la abuela". Es el dicho que estos días viene como anillo al dedo para el caso Ana Obregón. Aunque ella, a sus 68 años, no parió, sino que ha tenido a una niña (una nieta) por vientre de alquiler en Miami, donde esta práctica sí es legal, al contrario que en nuestro país. Según contó la actriz, presentadora y bióloga en su exclusiva de Hola, para cumplir con la última voluntad de su hijo fallecido Aless Lequio, de quien es el semen con el que se gestó la criatura, llamada Ana Sandra Lequio Obregón. El joven emprendedor quería tener cinco hijos y la protagonista de Ana y los 7, incluso, dejó la puerta abierta en su reportaje desde Miami: "Hombre, me hubiera gustado también niño, pero, ¿quién sabe? Mi hijo quería tener cinco hijos, así que a lo mejor el niño también llega algún día".
Hace dos miércoles, la noticia de Ana Obregón siendo madre por gestación subrogada a los 68 años abrió un sinfín de debates. Un miércoles después, el ovillo se enredó todavía más cuando la propia actriz confirmó, vía exclusiva, que no era su hija biológica, sino de su hijo Aless Lequio, que falleció el 13 de mayo de 2020. La presentadora, no obstante, es su madre legal (de momento en Estados Unidos, donde nació la niña).
El tema de la semana ha dado un giro este jueves y se ha complicado todavía un poco más. ¿Cómo? Con Rocío Carrasco de por medio. Ana Obregón se ha hecho eco de algunos mensajes en redes sociales defendiéndola de todas las críticas y polémicas que ha suscitado en los últimos días y en uno de ellos apuntan directamente contra la ex de Antonio David Flores.
Ana Obregón no cuenta en la extraordinaria entrevista de Hola aspectos muy relevantes de todo lo relacionado con su embarazo por gestación subrogada. No dice, por ejemplo, que ya está buscando un hermano para la recién nacida Ana Lequio, aunque lo da a entender. Tampoco confiesa que buscaba un varón y que los numerosos intentos fallidos de sacar adelante la gestación se repitieron por esta razón, porque no llegaba varón. Pero sobre todo no se refiere al hecho de que Alessandro Lequio esté enfadado porque le pidió reiteradamente que no llevara a cabo el proceso y ella siguió adelante, a pesar de que le ha hecho abuelo. Tampoco habla de los diferentes criterios de interpretación del deseo de Aless de conservar esperma: ¿era para ser padre junto a su novia por si se quedaba estéril por la quimio o era como sostiene Ana para ser padre con el óvulo de una desconocida después de muerto?
La noticia que nos ha sacudido en los últimos diez días es absolutamente insólita, lo suficiente como para suscitar interés en países donde ni siquiera saben quién es Ana Obregón. Pero, en España, lo que sería una información de sucesos, cuando no del programa de Iker Jiménez, inaudita en sí misma, aunque no estuviera protagonizada por una conocidísima presentadora, se ha contaminado con el tentador veneno de la fama rosa. La polémica, la emoción, el romanticismo o la empatía hacia una madre desgarrada por la muerte de un hijo tan joven distorsionan los extraños e inusuales acontecimientos, lo que en realidad ha ocurrido. Así sería, desprovista del halo de magia que otorgan las celebrities, la cruda verdad de lo acontecido, empezando por el titular:
Es de los pocos familiares cercanos que faltaba por opinar sobre el nuevo miembro de la familia Lequio-Obregón, y su postura ha sorprendido a muchos. Clemente, hermano del difunto Aless, está muy contento con la noticia y aplaude la decisión de Ana de haber utilizado el esperma de su hijo para continuar su legado: "Quiere conocer a la niña".
El conde italiano pasó de un "Yo lo sé todo" a un "Me estoy enterando de cosas que no sabía" en menos de 24 horas. Su silencio se ha interpretado como dolor y enfado por la situación que ha generado Ana Obregón con su maternidad subrogada y la posición en la que lo ha puesto a él, ahora abuelo. Muchos dudan de que consiga mantenerse al margen del circo que ha montado su ex y que promete nuevas entregas (llegada a España, bautizo y hasta hermanos) y lo cierto es que en los pasillos de Mediaset ya ha hecho preguntas a quienes podrían tener información de la que él carece: "¿Tú sabes si el material genético venía del hospital en el que fue tratado mi hijo? ¿Ha ido directamente ahí?".
La actriz vive con ilusión esta nueva etapa de la vida en la que, con 68 años, vuelve a dar biberones y cambiar pañales. No admite críticas ni entra en polémicas por haber utilizado la gestación subrogada para traer al mundo a su nieta y ya prepara emocionada su bautizo. Será a principios de verano, cuando la niña haya cumplido los tres meses de vida, y quiere vestirla con el mismo traje de cristianar que llevó su hijo Aless Lequio, según Marisa Martín Blázquez.
Es una idea de sus hermanos. Todos están ansiosos por conocer a Ana Sandra Lequio Obregón, la nieta de Ana Obregón y Alessandro Lequio y preparan una fiesta de bienvenida para cuando la artista y el bebé aterricen en Madrid dentro de unas semanas.
Ana García Obregón ha proporcionado a su hija (o nieta) la primera portada de su vida este miércoles, una decisión voluntaria de la actriz. Es evidente que la bióloga estaba deseosa de proclamar a los cuatro vientos que Ana Sandra Lequio Obregón, con dos semanas de vida, es en realidad su nieta, porque está concebida con el semen de su hijo fallecido hace tres años.
Es uno de los protagonistas (involuntario) de la noticia bomba de los últimos días: la maternidad por gestación subrogada de Ana Obregón a los 68 años con esperma de su hijo, Aless, muerto en mayo de 2020 tras una lucha contra el cáncer. Alessandro Lequio no ha querido entrar en polémicas y ha mantenido un discreto silencio, incluso ha 'desaparecido' del ojo público durante unos días. Este miércoles, justo cuando su ex confirma que la recién nacida es su nieta, el conde italiano ha reaparecido en redes sociales.
La psicóloga experta en educación infantil Rocío Ramos-Paúl (Supernany) ha aportado su visión de la entrevista que Ana Obregón ha concedido en exclusiva a Hola sobre el nacimiento de Ana Lequio. Las palabras de emoción desbordante de la actriz, con su nieta en brazos, llaman la atención de la psicóloga. Se trata de una situación vital arrolladora, que ha provocado un movimiento sísmico en Ana.
La maternidad por sustitución de Ana Obregón arrasa la mañana informativa de este miércoles 5 de abril. A la entrevista de la actriz, posando con su hija-nieta en brazos, se une una imagen insólita: la de la madre gestante que alquiló su vientre para dar a luz a Ana Sandra Lequio. Es la portada de Lecturas.
El artículo 175 del Código Civil dice literalmente: "No puede adoptarse a un descendiente", pero Ana Obregón habla que para ser la madre legal de Ana Lequio ha adoptado: madre adoptada, se autodenomina para contar que en realidad es abuela. Pero en España la actriz que acaba de ser abuela no puede adoptarla. Sin embargo, "todo es legal", según explica Ana. "La niña ha nacido en América y va a tener pasaporte americano y doble nacionalidad. Legalmente es mi hija y así aparece en su pasaporte. La registraré en el Consulado español y luego puedo traerla a casa", aclara. "Se llama Ana Sandra Lequio Obregón", dice la bióloga, pero sabemos que la inscribió como Ana Lequio Obregón en Estados Unidos. ¿Por qué? Porque oficialmente allí es la madre y no la abuela, aunque biológicamente lo sea.
Ana Obregón ha presentado a Ana Sandra Lequio Obregón, a quien considera su nieta porque biológicamente es hija de Aless Lequio, que falleció de cáncer en 2020. La pequeña, que nació hace unos días en Miami a través de la gestación subrogada, es, por lo tanto, la nieta del colaborador de televisión Alessandro Lequio.
La entrevista de Ana Obregón se lleva la apertura de El programa de Ana Rosa. Ha arrancado Joaquín Prat con las primeras declaraciones de la actriz en la revista Hola y qué vienen a zanjar el inmenso debate que había generado en los medios y en las redes la maternidad subrogada con el material genético de su hijo Aless Lequio. Más de 30 minutos de cobertura informativa.
Ana Obregón es la abuela biológica y madre adoptiva de Ana Lequio. La pequeña la llamará Bela. Así lo ha decidido y así lo cuenta en la entrevista a Hola: "Me llamará igual que Aless llamaba a su abuela, Bela. Yo voy a ser Bela y en cuanto tenga uso de razón se lo diré. (...) 'Tu papá te deseó y desgraciadamente no está aquí. Está en el cielo'".
La noticia de la maternidad de Ana Obregón ha sido un bombazo pero, ahora que sabemos el nombre completo de la pequeña, todavía estamos más asombrados. Un día antes de que se publicara la portada de Hola que ha zarandeado a la opinión pública en España y fuera de nuestras fronteras, Semana adelantaba que la bebé gestada mediante un vientre de alquiler en Miami se llama Ana.
"Esta niña no es mi hija, sino mi nieta. Es hija de Aless", afirma orgullosa Ana Obregón para presentarnos a Ana Lequio, a la que además, como homenaje, ha puesto el nombre de Sandra, Alessandra para los italianos, el nombre de la madre de Alessandro Lequio.
¿Volverías a hacerlo? Le pregunta a Ana Obregón la entrevistadora que realiza la exclusiva de la revista Hola. "Puede ser, puede ser. Fallé a mi hijo y no lo pude salvar, pero esto, que le juré con mi vida, lo he hecho y eso no me lo quita nadie, y no creo que haya nadie en el mundo que cuando vea a esta preciosidad de niña, tan deseada por parte de su padre desde el cielo y por mi parte desde la tierra y por parte de todos los que me quieren, no piensen igual", responde orgullosa.
Este sábado anunciábamos en primicia que la bebé de Ana Obregón nacida en Miami por gestación subrogada había sido inscrita con el nombre compuesto de Ana Lequio, Ana de primer nombre y Lequio de segundo nombre, y con el apellido de Obregón, el segundo de su madre, y no García, el del padre de la presentadora.
El culebrón de la actriz y su maternidad por vientre de alquiler a los 68 años solo acaba de empezar. La noticia saltó hace ya una semana pero son tantos los debates, las preguntas y las incógnitas que sobre el proceso (ilegal en España), sobre la paternidad de la recién nacida y sobre el papel de Alessandro Lequio padre en todo el asunto que habrá tema para rato. Este martes, de hecho, ya avisan de una segunda bomba sobre Ana Obregón que, incluso, podría dejarla en un lugar muy cuestionable: "Será la contra crónica de la semana pasada".
El presentador ha echado más leña al fuego que prendió el martes pasado cuando la revista Semana adelantó que Ana Obregón había sido madre por gestación subrogada a los 68 años. Siete días después, cuando pensábamos que ya pocas tramas en este nuevo culebrón nos podrían sorprender, Jorge Javier nos ha puesto la miel en la boca: "Lecturas va a publicar este miércoles una portada que otros medios van a censurar, estoy convencido".
Desde que falleció su Aless, hace ya tres años, el único sentido que Ana Obregón le veía a su vida era cumplir los deseos que tenía su hijo: su fundación, su libro y, según confesó él mismo en una entrevista, tener un hijo.
En un apartamento muy luminoso, soleado y minimal Ana Obregón vive sus primeros días junto a su hija, Ana Lequio. Impresionantes vistas a la bahía, a Miami Beach y al océano Atlántico. Ana no está sola, tal y como se lleva diciendo desde hace días. Su gran apoyo es Boris Izaguirre, amigo íntimo de la actriz y presentadora. El escritor y guionista "sabe cómo está y está en contacto con ella". Lo ha asegurado Omar Suárez en Sálvame.
La actualidad pasaba esta semana en España y también fuera de nuestras fronteras por la exclusiva de Ana Obregón, fotografiada junto a su hija a las puertas del hospital de Miami. Casi no se habla de otra cosa en la calle, en el Congreso y por supuesto en los medios de comunicación. La opinión pública ha sido zarandeada como en pocas ocasiones por una noticia que casi nadie nos esperábamos: la maternidad de la actriz por gestación subrogada a sus 68 años.
A las 11:46 de este sábado 1 de abril, Informalia adelantaba el nombre elegido por Ana García Obregón para su hija: Ana Lequio Obregón. Tras el revuelo que se ha generado por la exclusiva de este portal, la representante y mejor amiga de la actriz, Susana Uribarri, ha enviado un mensaje.
Al debate en torno a la moralidad de la gestación subrogada, practica ilegal en nuestro país, y la edad de la actriz (68) para empezar a hacerse cargo de una criatura, se suma también la teoría sobre el esperma donante. Informalia, de hecho, ha desvelado este sábado el nombre completo con el que la presentadora ha inscrito a su hija y que aviva los rumores sobre la paternidad: Ana Lequio Obregón.
