El Gobierno ha fijado que la utilización de cualquier tipo de mascarillas sea obligatorio a partir de este jueves en la vía pública, en espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público siempre que no sea posible mantener una distancia de seguridad interpersonal de al menos dos metros. | La última hora de la crisis sanitaria.
Así lo establece una orden firmada por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, que recoge el BOE de este miércoles, en la que se especifica que quedan excluidos del uso de la mascarilla los niños menores de seis años. Eso sí, su utilización es "recomendable" para los niños de entre tres y cinco años.
Entre las excepciones también se cuentan las personas que presenten algún tipo de dificultad respiratoria que pueda verse agravada por el uso de mascarilla y personas en las que el uso de mascarilla resulte contraindicado por motivos de salud debidamente justificados. Asimismo, no estarán obligado a su utilización aquellos que por su situación de discapacidad o dependencia presenten alteraciones de conducta que hagan inviable su utilización.
Su uso tampoco será obligatorio en el desarrollo de actividades en las que, por su propia naturaleza de estas, resulte incompatible el uso de la mascarilla como, por ejemplo, la ingesta de alimentos y bebidas. Por último, esta orden exime de la utilización de protección a las personas que aludan a causas de fuerza mayor o a una situación de necesidad.
De esta forma, al uso ya obligatorio en el transporte público su sumará ahora la utilización obligatoria en espacios cerrados y en la vía pública si no es posible garantizar la distancia mínima de seguridad de dos metros.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ya avanzó este martes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que había dado luz verde a la idea que, tras la consulta con las comunidades autónomas, que a su vez ya se había filtrado en la jornada del lunes.
¿Qué pasa con el suministro? El ministro de Sanidad informó de que la distribución y venta de mascarillas será la habitual hasta ahora, con un precio que no se modificará respecto al que ya se reguló hace unas semanas.
Lo ocurrido durante esta semana fue el aperitivo de lo que Illa ha explicado tras el Consejo de Ministros. La reunión que mantuvieron este lunes las comunidades autónomas con el Ministerio de Sanidad en torno al uso de la mascarilla terminó según se intuía desde el domingo: su uso será obligatorio en todos los espacios cerrados, además del transporte público, como hasta ahora. Además, también se tendrá que utilizar en la vía pública siempre y cuando no se pueda guardar la distancia de seguridad de dos metros.
La historia de las mascarillas ha sido un continuo de rectificaciones dentro de los equipos técnicos del Ministerio de Sanidad. De hecho, el director del Centro de Vigilancia Epiemiológica, Fernando Simón, dudaba de la necesidad de hacerlas obligatorias hasta hace unas horas, aunque durante la semana pasada reconoció que el uso de las mascarillas en lugares públicos (salvo excepciones) era altamente recomendable.
La presión ejercida desde algunas comunidades autónomas, que comenzó hace unos días (Madrid, por ejemplo, ya abrió la puerta a esta medida en palabras de su presidenta Isabel Díaz Ayuso), se ha impuesto. Además, la idea de hacer visible, de alguna forma, que la situación que se va a vivir a lo largo de las próximas semanas no es la misma que antes de la pandemia también ha ayudado en la decisión final.
La comunicación de datos entre Sanidad y las comunidades se hace por la tarde desde este lunes
Durante la reunión, además, se informó del nuevo sistema de comunicación de datos entre Comunidades Autónomas y el Ministerio de Sanidad, que desde este lunes y a partir de ahora se hará por la tarde. El ministro anunció el envío de guantes y de mascarillas a todas las comunidades y anticipó que se dará autonomía para el detalle de ciertas actividades dentro de la fase 2, en concreto a lo referido a las visitas a los centros de personas mayores.
En lo referente a los tramos horarios, en la siguiente fase en la que desaparecen los tramos horarios, será la Comunidad la que propondrá que se respete específicamente el que está establecido para personas mayores y con discapacidad.
El número máximo de personas autorizadas en actos culturales al aire libre quedará fijado por salud pública de la Comunidad. Además, el Gobierno murciano ha solicitado pautas para playas, y el Ministerio ha especificado que se abordará en reuniones bilaterales.