El precio del crudo mundial estuvo ligado durante los últimos doce meses a los vaivenes de la demanda mundial de carburante de manera que, si las perspectivas de la movilidad aumentaban fruto de una mejora en la incidencia del coronavirus, los precios iban de la mano. Esto quedó patente en el incremento del precio del crudo que se disparó un 35% en 2021, el mayor aumento anual desde 2009.
Ahora, con los precios del barril de Brent en torno a los 80 dólares, el consumo se mantiene expectante a los efectos de la variante ómicron. Todo apunta a que la demanda seguirá creciendo este año, como anticipó la OPEP que aumentará la producción y bombeo de petróleo como tenía previsto.
Lo que está claro es que en 2021 ha dejado a las petroleras con grandes beneficios fruto de la recuperación y para 2022, las previsiones para el conjunto del sector es que los beneficios sigan aumentando en un 20% de media para las 20 grandes productoras del oro negro del mundo.
Marathon será la petrolera que más aumentará sus ganancias y duplicará los 967 millones de euros que se anotará la compañía al cierre del ejercicio pasado, según recoge el consenso de mercado. Sin embargo, esta mejora en las cuentas de la petrolera sigue siendo escueta si se compara con los 8.250 millones de euros que perdió en 2020 con el desplome de la demanda por la pandemia.

En el otro lado se encuentran la noruega Equinor, que obtendrá un 2% menos de beneficios que en 2021 y PetroChina que obtendría un resultado un 7,5% inferior al ejercicio anterior, si bien es cierto que estas dos compañías soportaron mejor el 2020 y ninguna de las dos incurrió en pérdidas en el primer año de la pandemia.
Sin 'ventas' a la vista
El consenso de mercado ha recogido las buenas vibraciones que hay en el sector de cara a los próximos doce meses dado que consideran que el 65% de las 20 petroleras por capitalización bursátil son una opción de compra y habría que bajar hasta el puesto número 124 para encontrar a la primera recomendación de venta en la noruega TGS, según FactSet.
Del mismo modo, los expertos estiman que las compañías dedicadas al crudo todavía tendrán margen para mejorar su valor en los mercados hasta diciembre. Así, la media otorga un potencial del 17% para las primeras veinte de la tabla –la misma que asumen para Repsol varios puestos más abajo–.
Entre ellas, destacan el potencial alcista de Shell (Royal Dutch Shell) que puede subir un 35,7% desde su precio de cotización actual en los 20,5 euros así como para la hongkonesa CNOOC con un potencial alcista del 41%. De nuevo, el consenso recogido por FactSet estimó que Equinor ya cotiza por encima de su precio objetivo en los 21,7 euros.
Una vez más, queda patente el predominio de las compañías estadounidenses en materia de bombeo y distribución de crudo, ya que la compañía Aramco no ha entrado en este estudio dado que no tiene los suficientes analistas siguiendo su trayectoria. Exxon subió en 2021 un 69%, su mayor incremento en doce meses de su historia.
Las cuentas de la compañía estadounidense han mejorado trimestre a trimestre y para el analista de Bloomberg, Brett Gibbs, "los ingresos del último cuarto [de 2021] de Exxon Mobil apuntan a una sólida mejora en las ganancias que creemos debería aliviar las preocupaciones sobre su capacidad para financiar mayores gastos", según explicó el experto que también espera que la mejora se traslade hasta marzo de este año.
Algo similar ocurre con la segunda de la tabla, Chevron, que registrará un aumento del 57% en 2021 y obtendrá un 15% más de beneficios al cierre de este año, según el consenso de mercado. Aun así, ninguna de las cuatro más grandes –entre las que también están la holandesa Royal Dutch Shell y la petrolera francesa TotalEnergies– ha recuperado hasta la fecha las cifras que marcaban en 2019, antes de la llegada del coronavirus.
Una Repsol barata
La compañía española Repsol arrancó el 2022 en el puesto número 39 del sector ordenados por tamaño bursátil y como uno de los valores más alcistas dentro del Ibex 35. En su caso, los expertos estiman que en los próximos 12 meses la compañía aumentará sus beneficios netos en más de un 14% hasta los 2.607 millones de euros.
De momento cuenta con una recomendación de mantener, según el consenso recogido por FactSet. Asimismo, la compañía cotiza a un PER –veces que la acción recoge el beneficio previsto– para 2022 de 6,4 veces, la ratio más bajo entre sus homólogas europeas con un tamaño similar, por lo que arranca este año como la más barata.
Entre los primeros planes del año de la petrolera española se encontró la compra de Rockdale Marcellus, una gasística de Estados Unidos, por casi 200 millones de euros con lo que afianza su posición en el mercado estadounidense. "Es una operación estratégicamente buena por negocio y localización geográfica al poder reforzarse en la zona", apuntó el analista de Renta 4, Luis Padrón, que mantuvo su recomendación de sobreponderar con un precio objetivo de 13,3 euros. El conjunto del mercado le otorga un precio objetivo de 12,8 euros y un potencial del 15%.
Relacionados
- La OPEP seguirá abriendo los grifos del petróleo y producirá 400.000 barriles más en febrero
- La OPEP y Rusia debaten el futuro del petróleo en una reunión con ómicron y la inflación como protagonistas
- Dakar 2022: ecomovilidad en el paraíso del petróleo
- Sri Lanka pagará con té una vieja deuda de petróleo con Irán