
El crédito al consumo ha recuperado los niveles de crecimiento de inicios de año, previos al frenazo que vivió a partir del pasado mes de abril tras la intensificación de la desaceleración económica y las advertencias del Banco de España de endurecer la concesión de estos préstamos ante el repunte de la mora. Sin embargo, tras cinco meses con un crecimiento congelado o de leves caídas cuyo broche final lo puso agosto con un 6,65% menos de ventas de estos préstamos, la venta de estos créditos volvió a recuperar los niveles de crecimiento en septiembre y octubre, según los últimos datos publicados por el Banco de España.
Concretamente, el crédito al consumo creció un 5,74% en septiembre frente al año anterior con la concesión de 2.815 millones de euros y, hasta un 11,26% en octubre, con 3.250 millones de euros concedidos. Octubre se ha posicionado así como el segundo mes de mayor incremento en este año, de momento solo superado por enero cuando la concesión de estos préstamos se elevó un 14,4%.
La recuperación de estos niveles llega en un momento en el que el Banco Central Europeo (BCE) ya ha asegurado que la desaceleración ha tocado fondo y comenzará a haber una recuperación en 2020. Concretamente, el organismo supervisor europeo señaló que, finalmente los riesgos de las políticas comerciales de EEUU y el Brexit no se han manifestado de una forma tan virulenta como la esperada. Asimismo, desde el sector financiero español, también aseguran que, el actual sentimiento es que la desaceleración no será tan fuerte como la esperada. La confianza del consumidor es clave para la demanda de préstamos.
No obstante, el Banco de España también ha tenido un papel principal sobre el crédito al consumo. La institución que encabeza Pablo Hernández de Cos, que ya dio los primeros mensajes de alerta sobre la subida de la mora en estos préstamos a finales del año pasado, a mediados de este año urgió a la banca a controlar la concesión ante el repunte de impagos como preludio de la desaceleración de la economía. El propio De Cos aseguró en un acto ante la prensa el pasado mes de junio que las entidades debían reforzar sus criterios de concesión de créditos para lograr que el significativo incremento de la morosidad que se estaba observando, se moderara.
La banca se ha apoyado en los últimos años en la concesión de estos préstamos como palanca para ganar ingresos. Cabe destacar que, tras la crisis económica, la nueva concesión de hipotecas aún no supera la amortización de estos préstamos. Además, el bajo escenario de tipos de interés convierte en la actualidad los préstamos para la compra de vivienda poco rentables, y a todo esto, se le suma que la banca entró a mediados de 2018 en un guerra hipotecaria de bajada de precios, contra la que ya organismos como el Mecanismo Único de Supervisión (MUS), integrado en el Banco Central Europeo (BCE) se han mostrado contrarios. Concretamente, el italiano Andrea Enria, presidente del MUS, aseguró el pasado mes de octubre que la bajada de precios en las hipotecas a tipo fijo era una actividad de riesgo para la banca por su poca rentabilidad a largo plazo.
No obstante, y coincidiendo con esta advertencia del supervisor europeo, la banca española ha encarecido hasta en dos ocasiones -en noviembre y diciembre- el precio de sus hipotecas. De hecho, ya hay altos ejecutivos de entidades que aseguran que no van a entrar en el juego de sus competidores si el resultado es hacer sus productos poco rentables.
Tipos más altos
En este escenario, el crédito al consumo se ha erigido en los últimos años como palanca de crecimiento ante un prolongado escenario de tipos de interés negativos sobre los que el BCE aún no pone una fecha de primeras subidas sino sobre los que además indica que, en el caso de que sea necesario para evitar una recesión, hay margen para seguir bajándolos. En cambio, los préstamos al consumo, tienen intereses mucho más elevados. Según los últimos datos del Banco de España, en octubre, el tipo medio de estos préstamos en España fue del 8,34%, mientras que según publica el Instituto Nacional de Estadística (INE), el tipo medio al que se comercializaron las hipotecas en España en octubre se situó en el 2,5%.
De momento, a pesar de los últimos dos meses de crecimiento del crédito a consumo, los incrementos no se acercan a los vividos en 2018. La concesión de estos préstamos creció una media del 17,8% en el ejercicio pasado, donde hubo meses, como el de febrero de 2018, en el que las ventas escalaron hasta un 27%. Sin embargo, tras el frenazo vivido en este segmento en los meses centrales del año, el crecimiento medio de la concesión de estos préstamos en 2019 se ha limitado al 3,7%.