Director adjunto de elEconomista. Asesor del Fondo Tressis Cartera Eco30. Promotor del Eco10 y Eco30 Stoxx

El responsable de una de las grandes gestoras españolas nos comentaba esta semana que el mercado tiene un parecido enorme al de 2012. Antes de que el 26 de julio el entonces presidente del BCE, Mario Draghi, pronunciase el irónico discurso de "haré lo que haya que hacer, y créanme, será suficiente", las bolsas europeas eran carnaza de tiburones. Después de haberse recuperado más de un 50% tras los mínimos de Lehman se habían desplomado un 30% con una crisis de deuda en Europa que ponía en duda el euro.

El mayor mantra que tiene el mundo del ahorro en nuestro país es que la mejor de las inversiones es el inmobiliario. Es un error que la primera idea de inversión que tiene en la cabeza un español en cuanto genera suficiente patrimonio sea la de comprar otra vivienda para alquilar y convertirse en rentista. Esto ha provocado que tengamos una de las estructuras más ineficientes del ahorro financiero: cuatro de cada cinco euros están metidos en ladrillo frente a uno en mercados financieros.

La gestión del riesgo va intrínseca en el ADN de Carlos Val-Carreres. Nada más licenciarse estudió un máster de gestión de riesgos en Reino Unido y empezó su carrera como gestor de fondos long-short en Ibercaja, aunque su etapa más conocida en sus 20 años de trayectoria es la que desarrolló en Lierde, la sicav de la familia Alierta. Tras su fugaz paso por Singular Bank se puso al frente de Myinvestor Value, un fondo de método, como él define, que ha conseguido ser el segundo más rentable de su categoría Morningstar, la de compañías europeas de pequeña capitalización, con una volatilidad inferior a la de los índices. "El secreto está", dice, "en en cómo hacemos las cosas".

El gran debate en la fábrica del mundo de la inversión es la reconstrucción de toda la estructura de costes si finalmente desaparecen las retrocesiones por comercialización de productos de terceras entidades. El propio presidente de Efpa, Santiago Satrústegui, explica así la gravedad del problema: "No sorprende la iniciativa de la Comisión Europea al presentar el borrador de la estrategia del inversor minorista que aboga por la prohibición de la retrocesión, modificando la estructura de costes de los productos y el método de remuneración con el que los asesores financieros han trabajado tantos años. Lo ocurrido en Reino Unido, donde hace unos años se optó por este método, es un claro ejemplo de cómo este tipo de decisiones ha incrementado la brecha del asesoramiento hasta convertir este servicio en un lujo inaccesible para los ojos ahorradores menos pudientes".

Cortito y al pie del Ibex

Esta semana hemos recibido una de las noticias que fortifica la labor que desde este periódico se ha hecho durante años para mejorar la educación financiera. El fondo asesorado por elEconomista.es, Tressis Cartera Eco30, ha recibido la máxima calificación por parte de Morningstar: cinco estrellas, en la clase institucional, y cuatro estrellas en la clase dirigida a particulares.

La apertura del Miércoles Santo fue seguida en Iberdrola con la expectativa de rubricar un alza histórica. Cerca de las 20:00 de la tarde -hora española- del día anterior se comunicaba la venta de 13 plantas de ciclos combinados en México por 5.500 millones al fondo estatal de infraestructuras Fonadin, que está fuera del balance público y se financia en los mercados. Con esta operación Iberdrola se libera del yugo que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, le había puesto a la compañía de una posible nacionalización; se queda en el país con dinero para seguir invirtiendo en renovables; y le permite enarbolar la bandera más alta entre las grandes eléctricas verdes ya casi sin ciclos combinados. En palabras de AMLO, "hemos tenido algunas discrepancias, pero con el diálogo se puede todo. Es algo extraordinario, histórico". Mensaje rubricado por Sánchez Galán, al asegurar que "dos años más tarde hemos hablado y hemos llegado a un acuerdo. Una situación que es buena para el pueblo de México y que cumple con los intereses de los accionistas de Iberdrola".

José ramón iturriaga gestor de abante asesores y del fondo 'okavango delta'

Ser fiel a unas ideas no siempre es sencillo ni fácil de defender, pero, en algún momento, suele dar sus frutos. Y esto es lo que ha sucedido con José Ramón Iturriaga, gestor de Abante Asesores y al frente del fondo Okavango Delta (el mayor exponente de la inversión en bancos e inmobiliario del país), que, finalmente, está recogiendo lo sembrado después de una travesía por el desierto, de tipos al cero, que ha durado más de una década. El fondo suma en los últimos tres años una rentabilidad del 55%, aunque se haya tambaleado en las últimas semanas tras la quiebra tres bancos en EEUU y, en Europa, de Credit Suisse, que ha despertado temores de la última crisis financiera de 2008.

Superadas tres semanas desde la caída del Silicon Valley Bank, casi se han disipado todas las sospechas de crisis bancaria. Al final hemos conocido que tras el rescate de Credit Suisse por UBS, el pánico se generó cuando un inversor compró cinco millones en CDS de Deutsche Bank. La noticia se ha conocido esta semana, pero el viernes de la pasada convirtió al banco alemán en el epicentro de la crisis. Desde luego alguien lo supo ese día haciendo correr sangre, lo que no sabían es que el verdadero sentido de la compra del CDS no estaba en ganar con el hundimiento del Deutsche y sí en hacer una cobertura de una posición de largo plazo.