El aumento de los precios de la vivienda en EEUU marcaron un nuevo récord, impulsadas por las guerras de ofertas entre potenciales compradores, que no dejan de llevar las pujas al máximo ante la falta de oferta. En concreto, el avance en los precios registró máximos de 30 años, superando los hitos que habían marcado ya en los meses anteriores.