Una revisión regulatoria más consensuada y previsible evitará nuevas demandas en los tribunales internacionales
Una revisión regulatoria más consensuada y previsible evitará nuevas demandas en los tribunales internacionales
Francisco Reynés, presidente ejecutivo de Naturgy, pidió ayer una menor intervención pública en el sector energético: "Yo creo que en nuestro sector falta ciencia y sobra política", señaló, durante la inauguración de la tercera edición de Energy Prospectives, los encuentros de alto nivel sobre materia energética organizados por la Fundación Naturgy y el Iese.
El holding árabe Mubadala y la firma norteamericana The Carlyle Group, los dos propietarios de Cepsa, además de anunciar la nueva composición accionarial de la petrolera española -tienen el 63% y el 37%, respectivamente-, también dieron a conocer el nombre del nuevo consejero delegado de la compañía española, quien sustituirá al veterano Pedro Miró, que se retira.
Francisco Reynés, presidente ejecutivo de Naturgy, ha anunciado esta mañana que su compañía y la pública Sonatrach se repartirán el control del gasoducto Medgaz a partes iguales, a pesar de que la española sólo suma el 49% del capital, por el 51% de la argelina: "ninguno puede tomar una decisión que el otro no quiera", ha señalado a la prensa.
Teresa Ribera, ministra para la Transición Ecológica en funciones, ha anunciado en Oviedo que el Gobierno piensa destinar unos 600 millones de euros para ayudar a los territorios que resulten perjudicados por el proceso de transición energética y la descarbonización de la economía, como las comarcas afectadas por el cierre de las centrales de carbón. Se trata de un incremento del 50% sobre los fondos públicos originalmente previstos, que ascendían a 422 millones.
Ibedrola, Acciona y Telefónica son las empresas del Ibex35 que mejor están actuando e informando sobre cómo abordan los impactos del cambio climático, cómo aseguran la sostenibilidad ambiental y económica de su actividad y cómo contribuyen a conseguir unas emisiones neutras de carbono, de acuerdo con el Estudio del estado del reporting de sostenibilidad del Ibex-35, elaborado anualmente por la consultora Ecoact. El sector energético copa los 10 primeros puestos de la clasificación, con seis compañías.
El miedo a agigantar la avalancha de peticiones de acceso y conexión a la red eléctrica de nuevas plantas renovables y la subsiguiente especulación con los derechos concedidos -se vende el primer papelito de la tramitación a 80.000 euros por MW- ha frenado en seco la posibilidad de ampliar y optimizar la capacidad de dicha red al suavizar límites técnicos establecidos hace tres décadas.
Quizá sea por honrar una tradición de incertidumbre y sobresalto, quizá por despiste, quizá por ninguneo... No importa. El caso es que las renovables con retribución regulada –perciben unos 5.700 millones al año– no saben cuánto van a cobrar a partir del próximo 1 de enero. Según la Ley 24/2013 del sector eléctrico, cada seis ejercicios pueden revisarse su retribución, ligada a parámetros objetivos, al objeto de que obtengan una rentabilidad razonable, en la actualidad fijada en el 7,4%.