Corresponsal en Bruselas
Entrevista: Paschal Donohoe, presidente del Eurogrupo

El Eurogrupo marca las primeras líneas para que los países preparen los presupuestos del próximo año. La llamada, en esta ocasión, es a realizar un mayor ajuste, a sanear las cuentas y a recuperar el pulso de la economía, apunta su presidente, Paschal Donohoe. El irlandés puntualiza, en una entrevista con varios medios internacionales entre los que se encuentra El Economista, que deben retirarse las medidas de ayuda a la crisis energética. "Si hay déficit, hay que reducirlo. Si se está en equilibrio, hay que intentar pasar al superávit. Si se está en superávit, hay que intentar mantener ese superávit. La clave para lograrlo es la supresión progresiva de las medidas relacionadas con el coste de la vida".

La pandemia trajo años de manga ancha de gasto y de expansión fiscal en un intento por poner en marcha medidas que ayudarán a mitigar el golpe económico. Sucedió lo mismo tras el estallido de la guerra de Ucrania. Pero ahora, el Eurogrupo hace una llamada a dejar atrás la política fiscal neutral del último año para encarar un 2025 en el que sea "contractiva".

En un escenario incierto para la segunda economía del euro tras unos resultados electorales que apuntan a una Francia que elevará sus niveles de déficit, los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro se embarcan este lunes en una nueva conversación para definir la política fiscal de cara al próximo año. Se trata de un momento en el que los países tendrán que delinear sus planes estructurales y presupuestarios para que Bruselas les dé el visto bueno a lo largo del próximo otoño.

La Comisión Europea continúa poniendo en el foco las prácticas de las grandes plataformas digitales. En este caso le ha tocado el turno a la red social X, antigua Twitter. Bruselas ha enviado a la plataforma un pliego de cargos por infringir la normativa comunitaria de Servicios Digitales al considerar que sus indicadores de verificación azules son un engaño para los consumidores.

El gigante estadounidense Apple da un paso para calmar las aguas con el Ejecutivo comunitario y evitar una cuantiosa multa. Bruselas ha aceptado este miércoles los compromisos ofrecidos por la compañía tecnológica para dar acceso a sus competidores a las tecnologías que permiten ofrecer pagos sin contacto en los terminales móviles de iPhone. Tales compromisos son jurídicamente vinculantes, se extenderán durante 10 años y acarrearán multas del 10% de la facturación anual mundial en caso de incumplimiento.

La UE respira un poco más tranquila tras el resultado electoral en Francia. La victoria de una extrema derecha de Marine Le Pen ponía en entredicho los propios cimientos de la UE. El motor de decisiones de la UE, el eje franco-alemán, se tambaleaba y la amenaza de una minoría de bloqueo de Gobiernos de ultraderecha tenían todos los visos de catapultar el bloque desde dentro. Finalmente, la victoria de la izquierda, con el Nuevo Frente Popular –que aún tiene que nombrar un candidato a primer ministro–y el partido del presidente galo Emmanuel Macron, sobre la Agrupación Nacional de Le Pen, excluyen a esta última de la formación de Gobierno.

La UE encara un año en el que retoma la vuelta a las reglas fiscales, que fijan que los países de la UE no deben superar niveles de déficit del 3% sobre el PIB y del 60% en el caso de la deuda. Pese a la senda descendente que la deuda de España ha sido capaz de dibujar en los últimos años, la Comisión Europea tiene serias dudas de que tal tendencia se mantenga y advierte de que superará niveles del 110% en 2034.

La aritmética parlamentaria en España complica sustancialmente llegar a acuerdos entre grupos políticos y desafía el cumplimiento de los compromisos con Bruselas. La coyuntura no es menor ante el desafío de implementar las reformas e inversiones del Plan de Recuperación. Con la vista puesta en el quinto y sexto pago de fondos Next Generation, agendados para este año, el Gobierno tiene por delante un duro trabajo. Para el primero de los desembolsos debe impulsar una reforma fiscal cuya aprobación será ardua tarea en el Congreso.

Tras varios meses de investigación y en un escenario en el que las relaciones comerciales entre China y la UE son cada vez más tensas, Bruselas incrementa el cerco contra Pekín por incurrir en prácticas comerciales desleales. Lo que preocupa a la Comisión Europea es que el gigante asiático haya dotado a sus empresas de subsidios que el confieran ventaja competitiva frente a otras firmas europeas. El Ejecutivo comunitario ha anunciado que aplicará aranceles de hasta el 37,6% a los fabricantes chinos de vehículos eléctricos, frente al 38,1% que barajaba a mediados de junio.