Hay pocas personas en la historia que hayan influido tanto en la transformación y el desarrollo de las ciudades modernas como Elisha Otis. Este empresario inventó un simple pero revolucionario sistema de seguridad para ascensores, que evitó miles de muertes, pero que además cambió el rumbo de la arquitectura, la economía urbana y la vida moderna. Ha sido la fuerza silenciosa que ha impulsado el crecimiento vertical del mundo. Es la historia de cómo una empresa de ascensores elevó, literalmente, a la humanidad.