El gobierno catalán aprobó este martes por Decreto-ley la subida temporal del impuesto de Patrimonio en Cataluña para equipararlo a la nueva tasa estatal a las grandes fortunas y evitar que el Estado capte ingresos de las rentas más elevadas de la región. La Generalitat calcula que supondrá una recaudación adicional de 12 millones de euros anuales para la Agencia Tributaria de Cataluña.