El 75º cumpleaños se le pone cuesta arriba al rey Carlos III. Su relación con Harry, más que complicada, viene a empañar los preparativos. Ahora estalla una guerra sobre el envío, o no, de las invitaciones del duque de Sussex y si este ha declinado, o no, asistir al evento del 14 de noviembre en Londres.

Los Reyes han aterrizado en Dinamarca este lunes 6 de noviembre en torno a las 15:00. A su llegada al aeropuerto de Copenhague, han sido recibidos a pie de pista por la reina Margarita, su hijo Federico y la mujer de este, Mary Donaldson. Doña Letizia, que ha cambiado su abrigo negro por otro de color arena anudado a la cintura, ha mantenido su recogido en el pelo. Hemos visto que lucía unos pendientes de brillantes que pertenecen a doña Sofía. Un detalle con su suegra unos días después del 85º cumpleaños de la emérita. Letizia se ha fotografiado con la abogada australiana mostrando una gran sonrisa. Ambas comparten muchos campos de trabajo, como mujer, educación, infancia, salud mental y feminismo. Mary ha escogido un abrigo de color azul grafito, que llevaba combinado con un sombrero borsalino. Un look, entallado y sobrio, muy del estilo de Kate Middleton. A su llegada, ha cumplimentado al rey Felipe VI con una genuflexión sobre la alfombra roja que se había desplegado sobre la pista. La soberana danesa se ha decantado por el rosa fucsia en un conjunto de dos piezas a juego con el sombrero. Para combatir los rigores del frío escandinavo, una capa de lana en gris antracita. Junto a la Reina, estaba su hermana Benedicta.

Felipe VI y Letizia han dicho adiós en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas y han puesto rumbo a Dinamarca en un viaje de estado de tres días, desde este lunes 6 hasta el miércoles 8. La despedida con honores de los Reyes ha tenido lugar a las 10:45 de esta mañana. Doña Letizia ha escogido un abrigo oversize que ha combinado con una chaqueta americana de color verde pistacho, pantalón y botas negras. Ha recogido su larga melena con un moño para evitar que las ráfagas de viento, en el momento de la foto de la escalerilla del avión, la despeinen. Un truco de estilo muy útil. Ha coincidido este viaje con la celebración del 20 aniversario de su compromiso oficial en los jardines del Palacio de El Pardo.

Harry sigue atrincherado con respecto a su familia paterna. Carlos III cumple 75 años el próximo 14 de noviembre y las posibilidades de que el príncipe vaya a este a este evento familiar son igual a cero. Tanto que algunos medios como Daily Mail aseguran que ya ha rechazado la invitación. Una celebración que va a tener lugar en Clarence House y que marcará el gran desfile Trooping The Colour, que veremos en junio de 2024, cuando el monarca, por tradición, festeje su cumpleaños de forma pública y oficial. Si a Harry no se le espera en Clarence House, muchísimo menos que fuera acompañado por su mujer, Meghan Markle. Por cierto, que The Sunday Times lanza nuevos pronósticos sobre la duración de este matrimonio. El analista royal Graydon Carter, ex editor de Vanity Fair, en una entrevista vaticina un corto plazo para los Sussex: "Mediría este matrimonio por años en lugar de décadas".