En septiembre de 2015 se aprobó en la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) la Agenda 2030, con objetivos dirigidos hacia la transformación de la sociedad en el ámbito sostenible y económico. En concreto, el quinto objetivo tenía un fin muy claro: acabar con la desigualdad entre hombres y mujeres, tanto socialmente como económicamente.