Europa cierra una semana marcada por el último hito del índice bursátil de referencia del continente: superar sus máximos históricos que alcanzó durante la burbuja.com. El EuroStoxx 50 traspasó los 5.464 puntos, los que eran sus niveles más altos hasta este jueves, ya que también renovó y marcó un nuevo techo de toda su historia en los 5.500 puntos al cierre de esa sesión. Este es un momento de celebración para el Viejo Continente; el índice continental ha tardado 25 años en volver a cotizar en estos niveles previos a la explosión de la burbuja de las firmas relacionados con el mundo puntocom. La renta variable europea está viviendo una ebullición espectacular desde que empezó el año. Las principales referencias del continente ya superan el 10% de ascenso anual, frente a las subidas ligeras que se anotan los gigantes de Wall Street. Mientras, el selectivo nacional también está de fiesta al cumplir la octava semana consecutiva de subidas, su mayor rally semanal desde el 2006, con un ascenso del 2,1% semanal que deja al Ibex en los 12.956 puntos.
El hecho de que la bolsa europea esté cotizando nuevamente en sus máximos históricos del 2000, y marcando mejores niveles, es un logro importante para el selectivo, que se anota un 12,6% en el año. El EuroStoxx se ha pasado todo el siglo intentando alcanzar los 5.464 puntos nuevamente y recuperarse de la caída de la burbuja puntocom le ha tomado 25 años. Y es que, ante cada signo de recuperación que mostraba el índice llegaba una nueva crisis que tumbaba su cotización y la volvía a alejar de los niveles más altos de la historia.
De las puntocom a la guerra de Ucrania
El auge de las firmas relacionadas con el prefijo de World Wide Web llevó al índice a sus mejores niveles de la historia. Los inversores deseaban entrar de lleno en estas empresas que se presentaban como el futuro, lo que llevó a muchas tecnológicas a subir rápidamente en el parqué. Por lo tanto, con un ascenso tan marcado, cuando llegó la explosión de esta burbuja ante la pérdida de confianza, la caída fue igual de contundente. Ante el declive de estas firmas, el índice llegó a mínimos en el año 2003: los 1.849 puntos. Muchas de estas empresas desaparecieron en el camino, como es el caso de Pets.com o la icónica Yahoo! que ahora está en manos de Verizon.
Aunque después llegó un momento de ebullición para los mercados, otra crisis merodeaba los mercados. En este caso venía del corazón del sector bancario. La quiebra de Lehman Brothers en el año 2008 marcó un antes y un después para la economía mundial. Lo que empezó con la bancarrota de uno de los grandes bancos estadounidenses terminó afectando a toda la banca mundial, uno de los sectores con más peso en el mercado europeo ante la ponderación de sus firmas en el parqué, lo que llevó al EuroStoxx a volver a caer por debajo de sus peores niveles de la historia, en este momento marcó nuevos mínimos en los 1.809 puntos, que continúa siendo su cota más baja hasta la fecha.
Muy poco tiempo después, la crisis se instaló en el seno de Europa, poniendo en peligro la moneda única de la región. "Haré lo que sea necesario para salvar el euro... Y créanme, será suficiente", prometió Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo (BCE) en aquel momento. Estas palabras que terminó cumpliendo el alto mandatario llegaron después de que, por ejemplo, Grecia tuviera que ser rescatada, y las consecuencias de las políticas de austeridad no tuvieron la misma magnitud para todos los miembros de la Unión Europea. La alta deuda de los conocidos irónicamente como PIGS (Portugal, Italia, Irlanda, Grecia y España) llevó a que las rentabilidades de la renta fija escalasen y con ello llevaron a las primas de riesgo a niveles insostenibles.
Finalmente, Europa salió de ese largo bache. El inicio de esta década se pintaba positivo hasta que muy pronto explotó la pandemia del Covid-19. A nivel global, se impuso el aislamiento para evitar la propagación del virus, lo que supuso un parón en la actividad económica y el Covid crash no tardó en aparecer. En ese momento, Europa, con la lección aprendida de las crisis del euro, apoyó financieramente a sus economías, con el objetivo de impulsar nuevamente el crecimiento, pero en febrero de 2022 la invasión de Rusia a Ucrania abrió un nuevo frente de presión inflacionaria con una guerra a las puertas del continente.
A partir de ahí, el BCE, al mando de Christine Lagarde, llegó a incrementar el precio del dinero hasta el 4,5%, para poder hacerle frente a la galopante inflación en la región por el aumento de los precios de la energía, una consecuencia directa del conflicto armado. Y los altos tipos de interés no se empezaron a revertir hasta el año pasado, con el objetivo de animar la economía europea; fue la primera reducción del tipo básico en ocho años. Aun así, todavía la región se enfrenta a una inflación alta y a una baja competitividad industrial de sus países, con serios problemas en algunas de sus principales economías, como es el caso de Alemania y Francia.
Europa, en doble dígito
Este es el telón de fondo para los logros de la bolsa europea en lo que va de 2025, además, continúa la temporada de resultados en la región, que sigan batiendo las expectativas, y mientras las empresas del continente sigan mejorando sus beneficios, la euforia inversora no tendrá stop. El Dax alemán corona las subidas semanales al anotarse un 3,3%, y en el año acumula un 13% de ascenso, lo que ha permitido que el selectivo alemán continúe anotando nuevos máximos de su historia, por encima de los 22.612 puntos. Los inversores están apostando en este contexto de cara a las próximas elecciones, fijadas en el calendario para el 23 de febrero, en que esperan que el ganador de las urnas incentive la inversión para reactivar la decaída economía alemana.
Mientras, el Cac 40 se anota casi un 2,6% semanal, y así consigue el 11,1% en el año y acercarse a sus máximos históricos: los 8.239 puntos, de los que está a menos de un 1%. El FTSE 100, que avanza un 0,4% esta semana y corrige en la última sesión, se queda también a menos de un 1% de los 8.807 puntos que alcanzó la semana pasada.
Aun así, hay índices muy distantes de sus máximos históricos, como es el caso del FTSE Mib y el Ibex 35, que se anotan un 2% de subida esta semana cada una. La bolsa italiana avanza un 11% este 2025 y alcanza los 38.070 puntos, lo que deja al índice a un 32% de los 50.109 puntos, que son niveles previos a la quiebra de Lehman Brothers. El selectivo nacional, por su parte, sube un 11,7% en el año, prácticamente en los 13.000 puntos, pero está a un 23% de sus topes, también previos al estallido de la crisis de 2008.
Los dos sectores que están marcando las mayores subidas en el año son la banca y el lujo, los buques insignia de Europa. En el caso de los bancos, justamente las entidades españolas son las líderes de las alzas, el Banco Santander y BBVA, que suben un 30% y un 27,5%, respectivamente en el año, mientras que la segunda posición la ocupa la empresa de pagos Adyen, que se coló esta sesión con un 28% de subida.
Las firmas bancarias están viviendo una revalorización espectacular, a pesar de que el BCE continúa en la senda de bajadas de tipos. Aun así, este año se plantea como un desafío para este sector tras haber conseguido beneficios récords durante el periodo de tipos altos, marcaron su mejor ejercicio durante el año 2023, pero que podrían no revalidar este año.
Cerrando el top 5 de subidas en el año está el lujo, encabezados por EssilorLuxottica y Hermès, que se anotan un 25 y un 22,3% en lo que va de 2025, respectivamente. El año pasado fue complicado para la cotización de estas firmas, que se encontraron con un enfriamiento de sus ventas en China, ante la desaceleración económica en uno de sus principales compradores. Sin embargo, los resultados no están siendo tan catastróficos como se esperaba para el sector; en esta última sesión, la fabricante de la bolsa Birkin, Hermès, se revalorizaba un 6% ante el aumento de sus beneficios casi un 7% en 2024.
Wall Street lento, pero seguro
Unas de las principales amenazas vienen del otro lado del Atlántico, con la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca. El mandatario ha llevado a un nuevo nivel la posible guerra comercial con sus socios al firmar un memorándum con el que impondrá a partir de abril los "aranceles recíprocos" que estén en línea con el IVA que aplican estos países, una amenaza que parece especialmente dirigida a la UE, pero que no ha afectado su cotización esta sesión, ya que corrigen ligeramente. Aunque todo lo que dice o hace el presidente de Estados Unidos parece tener consecuencias negativas para Europa, su reunión con Vladímir Putin ha alegrado a los mercados este jueves ante la posibilidad de que el conflicto en Ucrania consiga una resolución, tres años después.
Además, esta semana el euro se ha fortalecido frente al euro. Después de que al inicio de enero se hiciese un suelo en los 1,02 dólares y que este mismo lunes retrocediese de nuevo hasta los 1,03, las últimas cuatro jornadas han sido alcistas para el euro, que ya supera la cota de los 1,05 dólares, máximos del año y niveles que no se veían en el tipo de cambio desde diciembre del año pasado.
Wall Street sigue al alza, aunque en una menor magnitud. Ya el año pasado, los tres principales índices conquistaron sus máximos históricos, niveles que renovaron en muchas oportunidades a lo largo del 2024. Incluso, la referencia americana por excelencia, el S&P 500, con su subida del 4% anual, ya lograba superar al cierre europeo sus máximos históricos, los 6.118 puntos. Por otro lado, el Nasdaq 100, con su 5% en el 2025, se queda a las puertas de volver a los 22.096 puntos, sus topes en la historia del índice. Mientras, el Dow Jones se anota un 5% este año, quedándose a un 0,6% de sus máximos, los 45.010 puntos.