La de hoy es una de esas jornadas marcadas en rojo en el calendario. Se trata de una sesión clave para las bolsas de uno y otro lado del Atlántico tras las declaraciones de ayer de Janet Yellen, Secretaria del Tesoro de EEUU, asegurando que ve necesaria una subida de los tipos de interés para prevenir del sobrecalentamiento de la economía.
Unas declaraciones que provocaron ayer un cierre en negativo en los principales parqués de uno y otro lado del Atlántico y que horas más adelante tuvieron que ser matizadas por la propia Yellen. Ahora estas palabras serán analizadas nuevamente en el mercado para dilucidar si actuarán a modo de catalizador negativo ante el miedo a un crecimiento desmesurado de la inflación o simplemente serán vistas como el detonante de una consolidación de las subidas que han llevado a los índices de Wall Street a máximos históricos y a los europeos a su nivel más alto del año.
"Tras el ataque fallido a los 4.040 puntos, ahora la cuestión será ver si las bolsas del Viejo Continente siguen optando por aliviar su sobrecompra moviéndose lateral, como en las últimas dos semanas, o bien optan por corregir más en profundidad", asegura Joan Cabrero, analista técnico y asesor de Ecotrader, quien advierte que esta última hipótesis tomaría más cuerpo si el EuroStoxx 50 pierde la base del canal que viene acotando su consolidación, los 3.920 puntos.
En el caso del Ibex 35, por su parte, el alcance de los 9.000 puntos se le ha atragantado al selectivo español y "desde ahí podría optar por tomarse un merecido descanso y desarrollar una nueva consolidación antes de proseguir con sus ascensos hacia objetivos que manejamos en los 10.100 puntos, que es donde cotizaba antes del Covid crash", advierte Cabrero, quien ya hizo especial hincapié en las últimas sesiones en que sin el apoyo de sus homólogos europeos, las ganancias del Ibex en solitario podrían ser efímeras.
Estabilidad en el euro/dólar
En este contexto, resulta curiosa la estabilidad que ha registrado una de las divisas que más protagonismo ha acaparado en las últimas horas, el dólar estadounidense. El cruce entre el euro y la divisa yankee cotiza por tercera semana consecutiva por encima de los 1,20 dólares por euro, permaneciendo así estable ante el terremoto que Yellen provocó en los mercados tras reconocer que la Fed podría tener que subir los tipos.
Eso sí, para dar fortaleza deberá superar los 1,21-1,2150 dólares por euro, que es por donde encuentra un relevante rango resistivo que "se presenta como la línea divisoria que separa un contexto lateral bajista de uno alcista hacia los 1,2550", asegura Joan Cabrero, analista técnico y asesor de Ecotrader.
El petróleo Brent, por su parte, registra una nueva sesión al alza y ya se encuentra a un paso de marcar nuevos máximos del año, algo que supondría acercarse de manera sibilina a cotas que no se veían desde el mes de mayo de 2019. El barril de referencia en Europa supera los 69,5 euros tras haber cosechado un avance cercano al 15% en el último mes y medio.