
Hasta los 3.614 puntos. El S&P 500 todavía tiene cerca de un 7% de recorrido para el consenso de analistas que reúne Bloomberg tras reconquistar este martes nuevos máximos históricos, al superar los 3.389 enteros, seis meses después del crash mundial provocado por la pandemia de coronavirus.
El 19 de febrero, el principal índice de la bolsa estadounidense firmó su anterior récord, justo antes de que el mercado adelantara dramáticamente el histórico impacto en la economía de la crisis sanitaria orginada en China y que empezaba a confirmarse a nivel global.
El S&P 500 llegó a desplomarse un 34%, hasta los 2.337 puntos del 23 de marzo, pero, desde entonces, Wall Street ha asumido al Covid-19 como un acelerador de la transformación, que ya estaba en marcha, hacia una hegomonía de la economía digital.
Fuerte rebote
El selectivo sube algo más de un 50% desde el suelo de la crisis, espoleado por el peso cada vez mayor de un sector tecnológico -con Amazon, Alphabet (la matriz de Google), Apple, Facebook, Netflix o Microsoft como absolutos líderes- que ha surgido como el gran ganador de la pandemia.
Tanto, que el índice de referencia para este industria, el Nasdaq 100, asciende casi un 65% desde los mínimos de la crisis y reconquistó niveles previos al crash y máximos históricos hace ya algunas semanas, el 3 de junio. De acabar el año hoy mismo, sería el mejor año del Nasdaq 100 desde 2009.
"La economía digital ha recibido un empujón estructural", reconoce David Tomás Navarro, gestor de renta variable de Andbank WM, quien considera que ciertos negocios como el comercio online o aspectos como el teletrabajo han dado saltos de varios años hacia adelante.

"Un entorno de crecimiento bajo, sin inflación y con tipos de interés en mínimos por mucho tiempo beneficia al sector tecnológico de Estados Unidos", añade Sasha Evers, director general para Iberia y Latam en BNY Mellon IM.
Unos factores que apoyan que si el S&P 500 tiene un 7% de potencial alcista, los expertos proyecten un recorrido de al menos un 3% más para un Nasdaq 100 que acumula ganancias del 31% en lo que va de año, un 2020 catastrófico en el resto de niveles, sobre todo en el social y en el sanitario.
Evidentemente, el esfuerzo fiscal de Estados Unidos y del resto de grandes estados y la presencia récord de los bancos centrales en el mercado, con la Reserva Federal al frente, han establecido los cimientos para que la tecnología haya tomado sin complejos su posición privilegiada en la nueva normalidad.
"Tenemos una Fed que está totalmente entregada, que mantendrá los tipos de interés bajos durante mucho tiempo y eso apoya las valoraciones más altas", observa Katie Nixon, directora de inversiones de Northern Trust WM, en Bloomberg TV.
Hasta el punto de que Wall Street se ha mantenido al margen del hecho de que Estados Unidos se haya convertido en el epicentro de la pandemia de Covid-19 por la mala gestión de la Administración del presidente Donald Trump de la crisis sanitaria, de la histórica contracción de la actividad recogida en los datos de PIB, de las renovadas tensiones comerciales con China, del retraso de los última ronda de estímulos y hasta de la turbulenta carrera electoral, que podría finalizar en noviembre con nuevo inquilino en la Casa Blanca.
De igual modo que el S&P 500 y el Nasdaq 100 retoman los ascensos interrumpidos en febrero por el estallido de la pandemia, hay empresas cotizadas en tales índices que también están en máximos, e incluso superan el precio objetivo del consenso de los analistas. Es, por ejemplo, el caso de Apple, Nvidia, Intuit o Deere.
Valores con más potencial
Son quinientas las compañías listadas en el Standard & Poor's, pero de las cincuenta primeras por capitalización bursátil dieciséis destacan por tener un recorrido alcista superior al 10% y recibir una recomendación de comprar del consenso de mercado que recoge FactSet.
Las tres primeras, con un potencial que sobrepasa el 15%, son Cisco Systems (17,9%), cuyo precio objetivo se sitúa en los 49,7 dólares; JP Morgan (15,2%), con una valoración de 114,6 dólares, y Chevron (15,2%), compañía que los analistas valoran en 100,6 dólares.
Por otro lado, entre las que cuentan con un rango potencial del 12% al 14% se encuentran Bristol-Myers Squibb, T-Mobile US, Eli Lilly, AbbVie, Comcast y Paypal. En el rango del 10% y 11% están Coca-Cola, Amazon, Alphabet, Visa, Merck y Bank of America.
Aunque su potencial alcista es del 9,3%, Microsoft es junto con Alphabet la firma con más recorrido previsto entre las que superan el billón de dólares en bolsa. Entre un 5% y un 9% de ascenso potencial están también Johnson & Johnson, Medtonic, Walmart, AT&T, Berkshire Hathaway, Facebook, Netflix, Amgen, Nike y Broadcom.
Pero si miramos más abajo, a las empresas cuyo valor bursátil es mucho menor que el de las compañías mencionadas, encontramos algunos porcentajes de subida en bolsa mucho más elevados, en gran parte por haber caído con más fuerza este año y no haberse recuperado del todo. Un ejemplo es el de Western Digital, cuyo recorrido en bolsa se estima del 50%, o el de Micron Technology y Devon Energy, de en torno al 45%.
Los ganadores y perdedores en un año convulso
Amazon ha ganado alrededor de 715.000 millones de dólares desde enero, gracias al aumento del envío de mercancias a las viviendas confinadas. Apple ha amasado 660.000 millones de dólares más en lo que va de ejercicio y Microsoft, 385.000 millones.
Pero también hay quienes han perdido un buen pedazo de su tamaño en el parqué, como JP Morgan: 137.000 millones de dólares de su capitalización bursátil se han desintegrado este año, de ahí que sea uno de los valores con un mayor potencial alcista. Bank of America ha perdido 95.000 millones; AT&T, unos 70.000 y hasta el coloso ilustrado de Berkshire Hathaway se ha dejado un pellizco de 57.000 millones.