
Los mercados están en estos momentos bajo los designios de los dos países que han sacado a relucir su lado oscuro en la guerra comercial: Estados Unidos y China. El último tira y afloja de ambas economías ha provocado que índices como el Ibex 35 se hayan dejado en apenas diez sesiones casi un 5%. Un balance que llevó al selectivo a ceder el soporte de los 8.730 puntos a lo largo de la semana.
Por debajo de este nivel la puerta está abierta a un contexto potencialmente bajista que podría llevar al Ibex a borrar las ganancias del año, al volver a poner a prueba los mínimos de Navidad. De hecho, el Ibex había llegado a ganar este año un 12% y ahora esa cifra es del 2,55%. Por tanto, no se podría hablar de muestras de fortaleza a corto plazo si el indicador no supera los 9.040 puntos, de los que está a un 2,9%.
El Ibex había llegado a ganar este año un 12%
En este contexto, ya hay compañías del Ibex en las que, desde el punto de vista técnico, ya no hay nada que hacer, ya que han perdido niveles cruciales. Se trata de Meliá Hotels, IAG, Ence, CaixaBank y Acerinox. El caso contrario es el de valores como Cellnex, Iberdrola, Enagás, Grifols, Ferrovial, MásMóvil, Siemens Gamesa, Cie y Naturgy, que están a más de un 10% de poner a prueba niveles que serían peligrosos.
Esta es la situación en las mayores compañías del Ibex.
Inditex: Busca una reestructuración al alza, pero necesita subir un 5,6%
De momento la textil gallega está fuera de peligro. Y es que se encuentra a una caída de más del 10% del que es su nivel crítico desde el punto de vista técnico, situado en los 23,70 euros. En los últimos meses, la compañía está buscando una reestructuración alcista que se confirmaría si supera los 28 euros, para lo que necesitaría escalar más de un 5%.
No obstante, un mayor ajuste hacia los 24,50/24 euros, sería una oportunidad para comprar. Uno de los problemas que ha estado afrontando el sector textil ha sido la caída de márgenes. Sin embargo, la previsión para Inditex ha mejorado sustancialmente. Si los expertos esperaban para este año un margen del 16,89% a principios de junio, ahora la estimación es que superará el 17%.
Santander: La puerta a una corrección todavía más profunda está abierta
Desde luego 2019 no está siendo el año del sector bancario. Con unos tipos de interés que siguen al 0% y una facilidad de depósito en el -0,4% (esto es que las entidades tienen que pagar por guardar su dinero en el BCE), el negocio sigue muy tocado, lo que se refleja en la cotización de estas firmas. Banco Santander ya se deja un 9% en el año y está a menos de un 5% de un nivel que abriría la puerta a caídas importantes.
Se trata de los 3,45 euros, cuya cesión abriría la puerta a una corrección más profunda, ya que las probabilidades de ver retrocesos hasta los 3 e incluso los 2,65 euros serían elevadas. Si eso ocurre, el balance anual del banco se traduciría en un desplome de más del 26%. Por ahora mantiene su recomendación de compra.
Iberdrola: Las caídas son normales, hay que seguir manteniéndola en cartera
Iberdrola es un título a mantener en cartera asumiendo eventuales consolidaciones y correcciones que hasta el momento son del todo normales en el transcurso de su evolución en subida absoluta en los últimos meses. De hecho, es una de las empresas del Ibex que más alejada se encuentra del soporte que, en ningún caso, debe perder. Esto es los 7,40 euros, para los que tendría que ceder más de un 15%.
Sin embargo, si la firma pierde los 8,44 euros, la caída podría llevar a los títulos a la cota de los 7,70/7,65 euros, que serían vistos como una oportunidad para entrar. La compañía esperaba que este año el crecimiento de su beneficio fuese de un solo dígito, pero ahora prevé una mejora del 10% gracias a la aceleración de los negocios.
Telefónica: La vuelta de los títulos a mínimos de 2012 no se puede descartar
La situación técnica de Telefónica es de todo menos positiva. Las caídas de la teleco podrían llevarla hasta los 6,25/6,10 euros, lo que implica un descenso inferior al 2% en el primer tramo y del 3,9% hasta el segundo. Por debajo de estas cotas ya no habría ningún soporte destacable hasta los mínimos de 2012, la zona de los 5,50 euros (descontando el dividendo) y este riesgo no se alejará mientras no supere el entorno resistivo en el que ha fracasado, la zona de los 7,80/7,65 euros.
Para ello, tendría que repuntar, al menos, un 20%. Desde el punto de vista fundamental, los expertos recomienda mantener sus títulos y han mejorado el nivel de apalancamiento que esperan para este año, desde las 2,9 que preveían a principios del ejercicio, a las 2,6 veces que se estiman ahora.
BBVA: Necesita despertar ya el interés comprador para evitar más daño
Al igual que le ocurre a Banco Santander, BBVA no está viviendo un buen 2019. A las generalidades de la industria, la entidad suma sus propios lastres. El más reciente es el escándalo por la contratación del excomisario José Manuel Villarejo para realizar presuntas labores de espionaje. Un caso que, según Moody's, puede desembocar en un problema de solvencia.
En este sentido, BBVA está poniendo a prueba los mínimos de Navidad y hay margen de caída hasta los 4,22/4,17 euros. Si no aparece en breve interés comprador de forma contundente y cede estos niveles, la puerta a caídas hacia los 3,20 euros estaría abierta de par en par. Hablamos de un retroceso potencial de más del 27%. Para entrar en este terreno peligroso todavía tiene que perder casi un 5%.
Amadeus: Aún tiene fortaleza de fondo, pero no puede perder los 63,50 euros
Amadeus es una de las doce compañías del Ibex 35 sobre la que cuelga un cartel de vender por parte del consenso de mercado. No obstante, desde el punto de vista técnico, mientras no pierda los 63,50 euros se puede seguir confiando en su fortaleza de fondo. Para dicho soporte tiene una caída por delante cercana al 8% (este año logra anotarse un alza del 13%).
En el primer semestre del año el grupo logró un beneficio cercano a los 667 millones de euros, un 9,9% más. Para Banco Sabadell, "ha mostrado solidez en su operativa gracias a la elevada visibilidad de sus ingresos y el alcance global de su negocio, bien diversificado geográficamente". Sin embargo, "se está viendo afectada por las incertidumbres que pesan en el negocio de distribución".
Aena: Si retrocede un 6,7% habrá una oportunidad para entrar en el valor
Después de marcar máximos crecientes e históricos una corrección en Aena debe ser vista como algo normal. Si esa caída profundiza hacia los 152 euros sería vista como una oportunidad inmejorable para buscar tomar posiciones. Pese a que la recomendación que pesa sobre sus títulos es una venta, el gestor aeroportuario está viviendo un gran año en bolsa, con un alza que supera el 19%.
Algunos expertos señalan que Aena se ha comportado como una especie de refugio este año. Y es que este tipo de negocios se consideran asimilables a los bonos (dado su perfil de generación de flujos), por lo que el inversor ha mirado hacia ellos en busca de rentabilidad. Además, tienen una elevada visibilidad de resultados a corto plazo, lo que aporta cierta tranquilidad.
