
La banca española ya ha permitido a 636.488 clientes aplazar el pago de sus préstamos tanto a través de la moratoria del Gobierno como por la puesta en marcha por el sector de forma voluntaria. En total, estas operaciones suponen el aplazamientos de créditos por un valor de 13.725 millones.
Según los datos aportados este jueves por la Asociación Española de Banca (AEB), las entidades adheridas a esta patronal (entre las que se excluyen las antiguas cajas) han aprobado 111.242 operaciones a través de la moratoria voluntaria (independiente a la del Gobierno) que puso en marcha el sector el pasado mes de abril. Así, el volumen de préstamos aplazados es de 6.615 millones de euros.
Estos datos se suman a los aportados por el Banco de España que revelan que, a cierre de abril, el conjunto de la banca española había recibido un total de 525.246 solicitudes de clientes para acogerse a la moratoria de créditos, tanto hipotecarios como personales, aprobada por el Gobierno el pasado mes de marzo. El total de peticiones llegadas a las entidades hasta el 30 de abril sumó una cuantía total de préstamos en moratoria de 7.110 millones de euros, según los datos del Banco de España.
La moratoria voluntaria de las entidades permiten a los clientes aplazar durante doce meses el pago del capital de la hipoteca (pero no los intereses) y, hasta seis meses, la amortización de los préstamos al consumo. En total, las entidades adheridas a la AEB han recibido 156.813 solicitudes de clientes desde abril para acogerse a la moratoria de préstamos, de las que han sido aprobadas el 71% de las mismas. Por segmentos, 78.850 clientes han pedido aplazar el pago de su hipoteca, pero hasta el 15 de mayo, según los últimos datos, se aprobaron 52.654 operaciones por 5.861 millones de euros. En el caso de los préstamos al consumo, la banca recibió 77.963 operaciones, de las que 58.588 han sido aprobadas por un importe de 753 millones de euros.
Por su parte, la moratoria del Gobierno permite solo el aplazamiento del préstamo (capital e intereses) por tres meses. Sin embargo, las entidades anunciaron la semana pasada un acuerdo para permitir a los clientes que se acojan a la iniciativa pública poder traspasarse a la privada una vez concluya el plazo permitido por el Ejecutivo.
Pueden acogerse a la moratoria voluntaria de la banca las personas físicas titulares de préstamos que se hayan visto afectadas económicamente por pasar a situación de desempleo o de expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), o por enfrentarse a un cese o reducción de su actividad económica u otras circunstancias equivalentes como consecuencia del coronavirus.