
La reforma del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) es un claro ejemplo de esa Europa que a menudo desespera por su lentitud al actuar y reaccionar, en gran parte por lo palos en las ruedas de los Estados miembros. Los ministros de Finanzas de la zona euro (el Eurogrupo) iban camino de conseguir este lunes la unanimidad necesaria para reformar el fondo de rescate de la zona euro de 500.000 millones de euros, sobre todo para hacer más flexibles y operativas sus líneas de crédito preventivas. Una fuente comunitaria comentó con elEconomista que el visto bueno se esperaba al final de la reunión.
Justo a este visto bueno político, que aún debe superar trámites parlamentarios el próximo año, también se aprobó que el MEDE pueda inyectar fondos en el fondo de resolución bancaria. De este modo, este instrumento que llegará a tener unos 60.000 billones cuando esté completo, siempre cuente con fondos incluso en épocas de intensas turbulencias bancarias.
El acuerdo en ambos puntos, el objetivo más asequibles de la reforma de la eurozona que se persiguió durante los últimos años antes de que golpeara el covid-19, ha estado bloqueado desde finales de 2019 por el encendido debate que provoca en Italia todo lo relacionado con el MEDE, a causa de los populistas de Movimiento 5 Estrellas y la Liga de Salvini.
El Eurogrupo también pasó revista a los avances en las otras patas de la unión bancaria, sobre todo la garantía común de depósitos (EDIS), que continúa atascada en las discusiones técnicas. "No ha habido progreso" con EDIS durante los pasados meses, dado que "toda la energía" se ha centrado en la lucha contra la pandemia y sus consecuencias, reconoció la ministra de Economía, Nadia Calviño, en una videoconferencia con periodistas antes del Eurogrupo.
Calviño se mostró más optimista con la posibilidad de desbloquear "en las próximas semanas y antes de finales de año" el fondo de recuperación europeo de 750.000 millones. El fondo se encuentra actualmente bloqueado por el veto de Hungría y Polonia por su rechazo a la condicionalidad al Estado de Derecho.
Calviño además explicó que está analizando con la Comisión Europea "el impacto fiscal" de la reforma de las pensiones, tal y como adelantó el vicepresidente de la institución, Valdis Dombrovskis, en una entrevista con elEconomista. La vicepresidenta del Gobierno valoró que la discusión con la Comisión sobre este punto y otras medidas adoptadas por Madrid está siendo "tremendamente constructivo".
El Eurogrupo también recibió este lunes el informe anual del FMI sobre la eurozona, por boca de su directora gerente, Kristalina Georgieva. El Fondo advierte a los europeos de que podría hacer falta más estímulos, tanto monetarios como fiscales, si los riesgos se materializan, como un impacto severo de una tercera ola de la pandemia o un retraso con la llegada de las vacunas.