Las expectativas sobre la recuperación mundial en 2021 son muy optimistas y un tanto complacientes porque la magnitud del apoyo prestado por los bancos centrales y los gobiernos no se había visto nunca anteriormente. El balance de la FED creció de 5.800 millones de dólares a 7.700 millones en un año. El balance del BCE es más del 60% del PIB de la Unión Europea y los diferentes gobiernos han comprometido 16.000 millones de dólares en paquetes presupuestarios en todo el mundo, es decir, el 20% del PIB mundial. Las expectativas de crecimiento económico son altas, pero hasta ahora han tenido dificultades para materializarse plenamente porque el virus sigue afectando la economía.