El PPI (índice de precios al productor de EEUU), una medida clave de la inflación, vivió en marzo su mayor incremento anual desde 2011, situándose así en el 4,2% durante el pasado mes. Este incremento aviva aún más el nerviosismo en los mercados por el aumento desmedido de los precios en la economía. Sin embargo, los analistas de Goldman Sachs señalan qué acciones podrían beneficiarse de este repunte en la inflación.