LA OPINIÓN DEL EXPERTO | JOAN CABRERO
Hay niveles en los mercados que parecen trazados con escuadra y cartabón. No porque el mercado sea matemático -ya sabemos que está gobernado por emociones humanas-, sino porque ciertos patrones se repiten con una cadencia casi natural. Uno de esos niveles, respetado por millones de inversores y seguido por algoritmos con precisión quirúrgica, es el 61,8% de Fibonacci.