Barcelona
En un mundo donde la innovación no se detiene y las industrias se reinventan constantemente, asignar entre un 10% y un 15% de la cartera a empresas emergentes con un potencial disruptivo y escalable sigue siendo una estrategia clave para quienes buscan rendimientos excepcionales a largo plazo. Estas compañías, aún en fases tempranas de reconocimiento, están marcando el camino hacia lo que podrían convertirse en gigantes del futuro. Como he señalado en entregas anteriores de esta serie, estas inversiones conllevan riesgos significativos, pero las oportunidades de retorno pueden ser comparables a haber invertido en compañías como Apple o Amazon en sus primeros días.
En esta nueva entrega, quiero centrarme en uno de los sectores más prometedores y revolucionarios dentro del ámbito biotecnológico: la búsqueda de la eterna juventud. Este campo, que hasta hace unos años parecía ciencia ficción, está avanzando a pasos agigantados gracias a la convergencia de la genética, la inteligencia artificial y la biología sintética. Las compañías que operan en este espacio no solo están desarrollando terapias para extender la vida humana, sino que también buscan regenerar tejidos, revertir el envejecimiento celular y curar enfermedades complejas como el cáncer y el Alzheimer.
El envejecimiento no es solo un proceso biológico inevitable, sino también el mayor factor de riesgo para enfermedades crónicas. Es por eso que las investigaciones en torno a la senescencia celular, la reprogramación epigenética y la regeneración de órganos están captando la atención de científicos e inversores por igual. Algunas empresas han logrado avances sorprendentes en la creación de terapias con células madre, edición genética mediante CRISPR y el uso de proteínas senolíticas para eliminar células envejecidas.
Uno de los aspectos más fascinantes de este sector es su impacto potencial en la economía global. La posibilidad de extender la vida saludable de las personas no solo transformaría la industria de la salud, sino que también modificaría la forma en que estructuramos el trabajo, las pensiones y la planificación financiera a largo plazo. Además, el mercado de la longevidad está atrayendo a inversores de renombre y a grandes corporaciones tecnológicas, que ven en la biotecnología aplicada a la regeneración celular un filón de crecimiento similar al que experimentó la computación en las últimas décadas.
Si bien muchas de estas soluciones aún se encuentran en fases de desarrollo y pruebas clínicas, la velocidad con la que se están produciendo avances sugiere que estamos al borde de una revolución biomédica. La reducción de costes en la secuenciación genética, el acceso a modelos predictivos de IA para el descubrimiento de fármacos y los ensayos clínicos acelerados están permitiendo que nuevas terapias lleguen al mercado mucho más rápido de lo que imaginábamos.
Hoy analizaré algunas de las compañías más disruptivas en el campo de la biotecnología enfocada en la longevidad y regeneración celular, aquellas con el potencial de transformar industrias enteras y ofrecer oportunidades únicas para nuestra cartera de largo plazo. Les quiero compartir este análisis, que está orientado a la cartera que estoy construyendo para mis mellizos, con el objetivo de identificar empresas clave que sean pilares en la revolución biomédica que marcará el futuro de la humanidad.
Como ya saben, esta cartera está formada con representantes de cada sector disruptivo que analizo. Mi intención es que conste de un total de 50 compañías cuidadosamente seleccionadas, abarcando entre 20 y 25 sectores innovadores que definirán el rumbo del futuro. Hoy inicio esta nueva exploración con la biotecnología de la longevidad, un ámbito que no solo promete cambiar la forma en que envejecemos, sino que también podría convertirse en un motor esencial para la próxima gran revolución en la salud humana.
Unity Biotechnology (UBX)
Unity Biotechnology está centrada en el desarrollo de terapias senolíticas, diseñadas para eliminar células envejecidas que contribuyen a enfermedades crónicas como la osteoartritis y enfermedades oculares relacionadas con la edad. Su enfoque busca ralentizar el envejecimiento celular y mejorar la calidad de vida en edades avanzadas.
Comienzo con esta compañía ya que es una seria candidata a entrar en breve en la cartera de mis mellizos después de que durante las últimas semanas haya desandado casi el 78,60% de Fibonacci de toda la fuerte subida que desde comienzos de año llevó al título de los 0,94 a los 3,10 dólares, tras alcanzar recientemente los 1,49 dólares. En el entorno donde cotiza ya podría ser una opción de largo plazo buscando que los 0,94 dólares hayan sido el suelo de la tendencia bajista que nació en los 5,50 dólares, que es el primer objetivo a buscar en próximos meses, pero no me conformaría con esa revalorización ya que, insisto, la estrategia consiste en mantener a estas compañías 20-25 años.
Longeveron (LVGN)
Longeveron es una biotecnológica especializada en terapias celulares para tratar enfermedades relacionadas con el envejecimiento y condiciones raras. Su principal apuesta es Lomecel-B, una terapia basada en células madre derivadas de médula ósea, en fase de desarrollo para tratar la insuficiencia cardíaca, el síndrome de hipoplasia del corazón izquierdo (HLHS) y el Alzheimer.
Esta compañía es una de las candidatas que valoro para la cartera disruptiva de mis mellizos. Sin embargo, compite en un sector con gigantes como Vertex, CRISPR Therapeutics y Unity Biotechnology, lo que supone un desafío importante. Longeveron es una apuesta de altísimo riesgo: si logra avances clínicos sólidos y una financiación estable, su potencial de revalorización es enorme. Pero, si falla en ensayos clínicos o enfrenta problemas regulatorios, el riesgo de dilución o incluso quiebra es elevado.
Esto último podría asustar, pero no en mi caso, ya que en este tipo de compañías manejo posiciones muy pequeñas. Por ejemplo, si destino 500 euros en cada una de estas apuestas disruptivas, puedo asumir que un 60% de ellas no funcionen y lleguen a quebrar. Ahora bien, ¿dónde tengo que firmar para que el 40% restante sí lo haga?
Desde un punto de vista técnico, me llama la atención que el título podría estar en disposición de formar un nuevo y potente impulso alcista, que se enmarcaría dentro del movimiento de recuperación que busca llevar a la acción de vuelta a los 45 dólares donde cotizaba en 2021, lo que supondría un espectacular 2350% de subida desde los niveles actuales.
AgeX Therapeutics (AGE)
AgeX se centra en la regeneración celular mediante la reprogramación epigenética y el uso de células madre pluripotentes para tratar enfermedades relacionadas con el envejecimiento. Su tecnología busca restaurar tejidos y prolongar la función celular en pacientes con deterioro degenerativo.
Técnicamente, el título parece que está tratando de sentar las bases de un suelo en torno a los 0,50 dólares. Pistas que apuntarían hacia el éxito de este intento las encontraremos si bate los 1,40 dólares.
Verve Therapeutics (VERV)
Aunque su enfoque principal es el tratamiento de enfermedades cardiovasculares, Verve Therapeutics utiliza técnicas avanzadas de edición genética para modificar genes responsables de enfermedades crónicas, un enfoque que podría ser clave para extender la longevidad y prevenir patologías asociadas con el envejecimiento.
La compañía sigue desarrollando una clara tendencia bajista desde los máximos que alcanzó poco después de iniciar su andadura bursátil en los 75 dólares. En estos momentos parece que está tratando de sentar las bases de un suelo en los 4,30 dólares que ponga fin a esa tendencia bajista.
