Hacienda
Las posturas irreconciliables a derecha e izquierda del PSOE frustran el intento del Gobierno de acometer una reforma fiscal suficiente como para cumplir con Bruselas. El grueso del paquete tributario naufraga y pone en entredicho la viabilidad de un proyecto de Presupuestos –el de 2025- que necesita de un consenso, que hoy no existe. Tan solo un puñado de enmiendas, convertidas en transaccionales, han logrado prosperar. Se trata de la corrección técnica sobre los cambios que el exministro Montoro acometió sobre Sociedades y el alza del alza del tipo máximo del IRPF a las rentas de capital para rendimientos de más de 300.000 euros. Por contra, y pese al intento de PSOE, la permanencia del impuesto a la banca ha sido rechazada por la Comisión de Hacienda, que ha llegado a ser pospuesta hasta en dos ocasiones. La permanencia del tributo a las energéticas queda fuera tras la presión de Junts. "No vamos a aceptar este chantaje", ha dicho Pilar Vallugera de ERC, que ha acusado a Junts de ser un lobby al servicio de Repsol.