Transformar residuos en energía limpia es la misión de Catalana de Biogás. La firma, participada por Sinia, el brazo inversor en energías renovables de Banco Sabadell, Hochreiter y Aprisco Energy, nació en 2022 y lleva todo este tiempo trabajando con potenciales clientes y en busca de las localizaciones más adecuadas para construir plantas que convierten restos agroindustriales, orgánicos y aguas residuales en gases renovables. "La planta debe adaptarse al territorio y no el territorio a la planta", es su lema.