
Jornada agridulce la de este lunes para el Govern. El Ejecutivo de Salvador Illa ha anunciado un decreto, que se aprobará este martes en el Consell Executiu, para una 'ampliación' de los Presupuestos prorrogados, pero no de la forma que pretendía.
La consejera de Economía y Finanzas, Alícia Romero, ha avanzado en rueda de prensa esta tarde un suplemento de crédito de 2.168 millones de euros, frente a los 4.000 millones que aspiraba el Govern y que venía negociando con sus socios de investidura ERC y los comunes.
En concreto, esta partida servirá para dar estabilidad en su mandato al Govern, con los Presupuestos prorrogados de 2023, y para garantizar la estabilidad de servicios públicos. El Ejecutivo de Illa defendía un único decreto de 4.000 millones de euros, pero no ha tenido más remedio que ceder para asegurarse que sale adelante en el Parlament en el plazo de un mes.
Confía en otros casi 2.000 millones
Romero ha explicado que el incremento del presupuesto iguala los cuatro que hubo durante 2024, e informó de que habrá otro aumento de 1.769 millones de euros para afrontar las obligaciones de 2025 y algunos compromisos plurianuales. En total, el Govern prevé tener unos recursos adicionales de 3.936,7 millones de euros este ejercicio, por los mayores ingresos previstos para este año.
Desde ERC han advertido por la mañana de que solo apoyarían un decreto de suplemento de crédito "técnico". El objetivo del partido republicano, que ha acabado consiguiendo, era reducirlo a la mitad, es decir, a unos 2.000 millones de euros, para luego seguir negociando. "Faltan otros 1.800 millones que se irán incorporando a través de otros decretos que tenemos en negociaciones con ERC y Comuns", ha confiado Romero.
Rebaja en el IRPF
El Govern y ERC han alcanzado un pacto para una reducción del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a las rentas inferiores a 33.000 brutos euros al año. La propuesta consiste en rebajar el tipo de la escala autonómica en el primer tramo de tributación en un punto: del 10,5% actual al 9,5%. La rebaja, que también se aprueba hoy, va en la línea con la que impulsó el partido que lidera Oriol Junqueras a finales de diciembre de 2023, cuando aún formaba parte del Gobierno catalán y negociaba los presupuestos de 2024, que no fructificaron.
La consejera ha detallado que los cambios en el IRPF reducirán los ingresos de la Generalitat en 50 millones de euros. Este acuerdo forma parte de los pactos entre PSC y ERC para hacer posible la investidura de Illa. La medida beneficiará especialmente a quienes ganen hasta 12.500 euros y no afectará a las rentas más altas, según explicó en rueda de prensa la secretaria general de ERC, Elisenda Alamany.
En la anterior etapa del Govern, con Natàlia Mas como consejera de Economía, el Ejecutivo cifró los beneficiados por esta rebaja fiscal en prácticamente tres de cada cuatro contribuyentes, unos 2,6 millones en total. En el caso de los contribuyentes con ingresos de 24.900 euros brutos anuales, con los cambios que prepara la Generalitat, la mitad tributaría al 9,5% por la escala estatal y la otra mitad, que antes tributaba al 10,5%, ahora lo hará también al 9,5%. El ahorro estimado para este contribuyente sería de 125 euros y la rebaja respecto al tramo autonómico, de casi un 10%.
Dos nuevos tramos en el ITP
En lo que se refiere al impuesto sobre transmisiones patrimoniales (ITP), el Govern crea dos nuevos tramos que gravan la compra de inmuebles de más de 900.000 euros con un 12% y de más de 1,5 millones, con un 13%. También una tarifa del 20% para grandes tenedores, que tendrán deducciones del 100% si son cooperativas y del 50% si se dedican a vivienda de protección habitual o a actividad económica. Asimismo, se eleva hasta los 35 años la reducción del ITP hasta el 5% y se aplicará esta misma rebaja a las víctimas de violencia machista.
De su lado, el aumento del ITP para grandes tenedores significará incrementar los ingresos públicos en 90 millones, mientras que la eliminación de la supresión del ITP a empresas inmobiliarias para comprar inmuebles, lo hará en 85 millones. Además, se incrementará la tasa turística en toda Cataluña y se permite a los ayuntamientos aprobar un recargo de hasta 4 euros (8 euros en el caso de Barcelona ciudad). Según Romero, todos los cambios añadirán 219 millones a las arcas públicas.
El gobierno catalán dará luz verde a ampliar la deducción máxima en el IRPF por el alquiler de la vivienda habitual, que pasa de 300 a 500 euros. El tope de renta para aspirar a este descuento, se eleva hasta el equivalente a un salario de entre 35.000 y 40.000 euros brutos anuales. El Govern calcula que, de este modo, 14.589 catalanes más podrán beneficiarse de esta deducción.
Otras medidas
El Govern modificará la normativa reguladora del Instituto Catalán de Fianzas (ICF) para incluir las personas físicas entre los beneficiarios de los préstamos, especialmente en el ámbito de la vivienda protegida, la sostenibilidad y la protección del medio ambiente. Por otra parte, la energética pública catalana (L'Energètica) pasará a suministrar energía renovables al Parlamento de Cataluña, el Consejo de Garantías Estatutarias, el Síndic de Greuges, la Sindicatura de Comptes, el Consejo Audiovisual de Cataluña y la Oficina Antifraude de Cataluña.