Amador G. Ayora, director de elEconomista
- 31/05/2016, 00:05
31/05/2016, 00:05
Tue, 31 May 2016 00:05:32 +0200
Latinoamérica logró escapar a los efectos devastadores de la pasada crisis. El problema de las hipotecas basura, que asoló la economía mundial y la española en particular, con tasas de desempleo superiores al 25 por ciento, pasó de puntillas sobre América Latina. Ello permitió que la fortaleza de las grandes empresas españolas, omnipresente en la region, se mantuviera intacta. Pero las cosas han cambiado. El desplome en los precios de materias primas como el acero o de la minería, la principal fuente de riqueza en países como Perú, frenó su desarrollo. El culpable es China, país al que se dirigen un tercio de las exportaciones y del que procede una parte creciente de las inversiones. El devenir del dragón asiático marcará su ritmo de crecimiento en los próximos años. Consulte el especial 'Proyectos extraordinarios en América'